Posadas. Los chicos que piden monedas en la calle y los semáforos pueden llegar a juntar hasta tres mil pesos por mes. Es la cifra que manejan en la Dirección de Infancia de Desarrollo Social, desde donde aseguran que también es el motivo por el cual muchos padres siguen con la explotación. En ese sentido, se está organizando nuevamente una campaña que se denominará “Monedas Cero” para concientizar al respecto y que la gente no entregue más dinero. Fabiana Bazante, directora de Infancia, comentó que hay muchas situaciones y hay niños que “están en la calle porque los padres los mandan y los que están hace mucho tiempo son los que consiguen juntar más plata”. Bazante comentó que la campaña no es nueva, pero que se está trabajando para implementarla nuevamente. Además desde su dirección dijo que se apunta a trabajar con cada familia. “Se trata de familias humildes, cuando nos acercamos muchos padres nos dicen que no pueden con sus hijos, por eso queremos trabajar con cada caso para hacerles entender que el hecho de que sean pobres no implica que no sean buenos padres”, detalló. En ese sentido, la funcionaria indicó que se está haciendo el seguimiento de los casos, “se trabajó con las familias, hay un caso que ambos padres tienen pensiones, tienen casa, pero de igual manera mandan a sus dos nenas a pedir al centro”. Bazante señaló que a nivel municipal también se está conformando el Consejo Municipal de Garantías de Derechos, Niñez, Adolescencia y Familia, que por ley tiene que integrarse en cada una de las localidades.Hace dos años, desde el área de la Dirección General de Acción Social, entonces a cargo de Rosalía Moyano se había implementado una campaña “No a la Moneda”. La misma, según Moyano tuvo buenos resultados, hubo concientización y la gente se comunicaba cuando veía un chico en situación de calle para que fuera enviado al Hogar de Día. En ese sentido, Moyano quien sigue trabajando en la misma problemática contó que la campaña no sigue, pero sí continúa la tarea conjunta con el Hogar de Día y el Hogar de Noche, del padre Alberto Barros y coincidió en que “hay chicos que son expulsados de sus hogares y explotados para conseguir monedas”. En Posadas estiman que hay unos quince a veinte chicos que duermen en las calles, muchos con problemas de adicción.





Discussion about this post