AZARA (Enviados especiales). La tranquilidad del pueblo se vio sacudida en los últimos días por un debate que no es nuevo, pero que tuvo la fuerza de una joven que opinó de temas de actualidad y generó repercusiones en las más altas autoridades educativas de Misiones y políticas de su localidad.Marcia Machjer, de quince años, no hizo más que responder a un reportaje radial, revelando con absoluta libertad su sentido ambientalista, su descreimiento en los políticos en general, lo que generó apoyos y rechazos. A pesar del miedo inicial, sobre todo por las consecuencias hacia su escuela, Marcia asiste con entereza cada mañana al Bolp 32. Y en privado, sigue recibiendo llamados de adhesión de mucha gente de toda la provincia, que la trata de incentivar para seguir adelante.Hasta ayer, en su Facebook, sólo hizo dos menciones a esta situación: la primera el jueves cuando posteó “que difícil que es mi vida! Hay que enfrentar las dificultades… No queda otra… Es la mejor forma de demostrar que se puede…”. Y ayer, al comentar en el sitio de Radio News: “El camino de la verdad es difícil tanto como desmentir alguna mentira…”.El pequeño edificio del Bolp 32 (que hoy supera los 300 alumnos como matrícula) está ubicado a pocos metros de la sede de la Municipalidad de Azara, sobre la avenida Centenario. A pesar de su escaso espacio físico, es una usina de trabajos escolares que dan que hablar en toda la tierra colorada.Y a pesar de las molestias expresadas el mismo intendente Daniel Yendrika y otros actores comunitarios, admiten que el Bolp necesita una nueva sede por su crecimiento poblacional, gestión municipal que estaría avanzada.Como el mismo debate por represas, en la comunidad de Azara están las opiniones divididas entre los que entienden que la construcción de represas generará progreso para la ciudad; y los que no están de acuerdo que el progreso llegue a costa del impacto social y ambiental de un emprendimiento hidroeléctrico. Lo positivo del caso, es que se habla del tema en cualquier encuentro entre vecinos y en muchos casos, con la misma fuerza e intensidad de posiciones que van más allá del sí o el no a las represas, sino el legado que dejarán las generaciones más longevas a las más jóvenes.Ante la visita de PRIMERA EDICIÓN a la escuela secundaria de Azara, la directora Marta Teleban y la docente asesora del grupo decidieron mantener silencio y no aceptar contactos periodísticos. Tampoco admitieron el diálogo con los jóvenes “para preservarlos” de la situación de tensión que se vive.Sin embargo, enviaron al equipo de este diario un mensaje muy alentador. El bachillerato confirmó su participación en la instancia provincial de la Feria de Ciencias organizada por la Propacyt. Y Marcia continuará integrando el equipo triunfante. Así, el trabajo sobre las represas y su impacto, fue confirmado para participar (como ganador de la instancia zonal Apóstoles con 95 puntos) de la jornada provincial en el Centro de Convenciones de la capital misionera rumbo a la etapa nacional si consigue el mismo éxito. Aunque, según admitieron fuentes consultadas, persisten las dudas sobre el contenido final de la exposición que realizarán, con garantías de la escuela que los alumnos cuentan con el apoyo de la institución. Resta definir si se avanza en la investigación sobre el impacto en la salud de los emprendimientos hidroeléctricos en climas subtropicales, que estaba en la planificación inicial del trabajo científico escolar. No hubo encuentroA pesar de la invitación formalizada el jueves por parte del intendente Yendrika para ayer a las 9, los alumnos y docentes del Bolp 32 no asistieron al encuentro pautado en la Municipalidad de Azara. Según pudo averiguar PRIMERA EDICIÓN, la negativa partió de las autoridades del establecimiento que habrían decidido “que los alumnos permanezcan en las aulas” como forma de preservarlos de una mayor exposición pública. Es que casi a la misma hora de la citación, se organizó una nueva reunión entre alumnos y profesora de física y química para ir tomando decisiones sobre el trabajo para la feria.A las 9, la mañana presentaba poco movimiento en el edificio municipal y la radio avanzaba en las oficinas. El tema era el mismo: la polémica generada por el pedido del presidente del Consejo General de Educación de “obviar expresiones políticas” en la investigación para la feria de ciencias del Bolp 32. Sumado a ello, el enojo de Yendrika por las críticas de una joven de 15 años, que no le cayeron nada simpáticas y por las que llegó a pedir “rectificaciones públicas”. Tras la espera, en la que el jefe comunal renovador se entrevistó con este diario, la agenda de Yendrika continuó con la recepción de media docena de directores de escuelas primarias. Con lo cual, el encuentro en el que iban a pedir explicaciones desde la comuna, por ahora, no se pudo concretar. “Como con Yacyretá, hubo que sacrificar muchas cosas y acá va a pasar lo mismo”AZARA (enviados especiales). El intendente de esta localidad, Daniel Yendrika, recibió en su despacho comunal a PRIMERA EDICIÓN. Se refirió a la polémica sobre el trabajo de los alumnos del Bolp 32, habló del debate sobre represas y el futuro de su localidad. Con un tono más apacible que el día anterior, en que anticipó la reunión con la comunidad educativa del bachillerato, siempre gentil, el intendente aprovechó para dar su visión de los hechos sobre los que se hablar en todo Azara. Con un claro discurso pro construcción del complejo hidroeléctrico Garabí-Panambí, explicó las razones de su posición, cuestionó un posible plebiscito y pidió “estar preparados para lo que se viene, que es algo muy grande”.Sin embargo, admitió que ante la llegada de una represa, habrá que “sacrificar cosas” y se autodenominó “una de las personas más perjudicadas si se hace la represa” por las propiedades familiares que tiene en el lugar donde se inundarán las tierras, de las que dijo que “hoy solo sirven para criar vacas y plantar pino”.Finalmente, aseguró que el Gobierno “quiere bajar cuando haya definiciones con ingenieros, médicos especialistas en represas” con audiencias públicas. Cuestionó que “falta comunicación”.“Confusión muy grande”En primer lugar, Yendrika dijo sacar como conclusión de la polémica con los alumnos del Bolp 32 que “hubo una confusión muy grande. Los chicos, un viernes antes de su exposición en Ap&oacut
e;stoles, estuvieron conmigo, me dijeron que querían tener una entrevista, les dije que no había problemas pero la pasamos para el lunes porque pensamos que sería extensa. Y así fue, estuvimos dos horas y pico. Todavía me preguntaron si podían grabar y les dije que no había problema… Sobre lo que dijo la chica de que yo no los atendí, me llamó la atención. Porque yo los atendí, me preocupé para que los chicos fueran a la Feria de Ciencias, les di el colectivo, puse plata para que pudieran comer y se sintieran bien, al final me desayuné con esto de que no los quise atender y que yo andaba por Brasil”, aseguró.Negó haber tenido una conversación con el presidente del CGE. “Lo del pueblo se arregla en el pueblo. Quería hoy sentarme con ellos y decirles: ‘Chicos tanto hablamos, dos horas y pico con gente esperando y después que me venga esta sorpresa…’, quería que me aclararan esto. Y si no estuve, es porque ando corriendo por Posadas tratando de gestionar para nuestro pueblo. Porque nuestro pueblo esta en un letargo hermano que no te das idea”. Sobre el trabajo escolar dijo: “Me parece bien, como yo les dije. Estén en contra o no estén en contra. Yo me siento con el que esta a favor o esta en contra. Es el futuro de ellos… ¿cómo no me voy a preocupar? Y les recalqué que tuve la oportunidad de irme de mi pueblo, pero me quedé preocupado por lo que viene, viene algo muy grande acá. Y por el futuro de ellos, porque serán ellos los que verán el cambio que va a generar todo esto si se llega a hacer”.Seguidamente se denominó “una de las personas más perjudicadas si se hace la represa”. Contó que posee “una chacra de mi abuelo sobre el arroyo Chimiray y otra sobre el arroyo Tunas. Las dos se inundan y en el caso de la indemnización nadie te va a pagar el valor sentimental que tienen esas tierras que eran de nuestros abuelos que vinieron a hacer patria acá”. Pero advirtió que Garabí “es un hecho. Contra el futuro, contra el progreso, por el futuro de ellos, yo no me puedo poner en contra. Y me preocupo, porque no quiero que esto llegue y suceda lo que pasó en Posadas que hubo que levantar y les llegó el agua al cuello. Y yo no quiero eso para mi pueblo, si lo vamos a hacer que se haga bien”, dijo.ExtremistasEn otro orden, el intendente de Azara fue consultado si el contexto del trabajo tiene un tinte político desde los jóvenes. Se limitó a afirmar: “Al menos lo que yo leí y vi, ella dijo que es militante por el no a las represas. Yo les expliqué en la reunión que a veces se van al extremo. Al extremo del que quiere y al extremo del que no quiere. Y al ser extremista en las cosas, chocás. Yo escuché las dos campanas. Antes de opinar ya me fui desde 2002 a averiguar temas sobre Garabí, me fui a Brasil, conocí represas. Me senté con el ministro de Energía de Brasil, con el director de la Electrobras, con De Vido, con el presidente de la Unión Industrial Argentina, con intendentes brasileños, con gente de la EBY. Preocupado y escuchando”.Y cargó contra las movilizaciones en su pueblo organizadas por ATE y partidos políticos. Contó que siendo secretario de Gobierno municipal en la gestión anterior, realizó varias reuniones de debate en el salón parroquial. “Venía bien, después empezó a participar gente de ATE, se empezó a politizar. Y cuando nos dimos cuenta, aparecieron todos los políticos (mencionó al puertismo) y ahí se pudrió todo. Yo me retiré y otro de los que organizaba también y nunca más se hizo”, afirmó.“Está bien que haya gente que diga que no y hay gente que dice que sí. Vamos a sentarnos, porque alguna conclusión tenemos que sacar de ésto. Pero no ser extremista”, dijo. Beneficios y sacrificiosPara Daniel Yendrika, “la energía te trae trabajo, progreso. Aunque yo soy consciente de que tenés que sacrificar cosas para que esto llegue. Como con Yacyretá, hubo que sacrificar muchas cosas y acá va a pasar lo mismo. Pero no podemos seguir pensando en seguir con una vela, que los chicos no tengan un futuro. Si vamos a hacer un sacrificio con las tierras, y la ecología, bueno, que venga los beneficios como contraparte: trabajo para mi gente, futuro para mi pueblo, obras y empresas para mi pueblo”.Sobre las garantías de que la energía quede en la zona, dijo que “esto nos compete a mí como intendente, al gobernador, a los ciudadanos de pelear de que quede acá. Que la energía no se vaya y que las regalías y las obras queden acá”. Y agregó: “En su momento cuando estuvimos con el ministro De Vido se comprometieron y nos dijeron ‘vayan sentándose entre los intendentes’”.“Te voy a ser sincero, no hay desarrollo sin Garabí. Y doy un ejemplo a la gente: ¿qué sería Posadas sin la EBY? Posadas nunca miró el río y cambió todo. Genera desarrollo, trae sus consecuencias, no todo es color de rosa. Esos errores que se cometieron con Yacyretá no los vamos a cometer acá”, aseguró. En tono de advertencia, aseguró que en su localidad “hay una colonia donde yo tenía primos y desapareció. Tenía hasta una escuela, era una de las más pujantes y desapareció. Y hay otra colonia que me está por desaparecer. La década del 90 los reventó. No podemos pensar que la yerba va a valer oro. Es una miseria lo que les pagan”. Audiencias públicasFinalmente, el intendente de Azara reflexionó sobre el rol informativo del Gobierno: “Muchos me preguntan ¿por qué el Gobierno no dice nada? Y eso fue lo que yo les planteé a varios del Gobierno y cuando estuvimos en Buenos Aires, nos dijeron que cuando haya información, debe ser exacta y va a surgir del último estudio socio-económico cuando esté definido. Y en base a este estudio se puede modificar hasta la altura de la cota. Cuando esté el estudio, la idea del Gobierno es bajar con eso a audiencias públicas y cualquier colono podrá preguntar si lo va a afectar. Que le puedan decir si le toca, si lo van a indemnizar, cuánto le va a tocar, cuánto vale la tierra”.




Discussion about this post