SALTA (Medios Digitales). El policía Roberto Barrionuevo, uno de los detenidos por el caso de las torturas a dos jóvenes en una comisaría salteña de General Güemes, negó ser el autor de la filmación de los apremios.Sin embargo, el efectivo confirmó que los jóvenes que aparecen en el video estuvieron detenidos y que él los dejó con otros efectivos y retornó a la oficina de atención al público, según informó a un matutino porteño el abogado Pablo Cardozo, quien asistió ayer a la mañana a la indagatoria citada por el juez de Instrucción de la Tercera Nominación de Salta, Pablo Farah. El letrado, que asiste a otros tres policías acusados, señaló que si bien no prestaron declaración indagatoria se manifestaron inocentes de las imputaciones y anticipó que impugnará la validez probatoria de las imágenes que, según denuncia, no son originales sino extraídas de Internet, de TN y la Gente. Por su parte, la Asociación Salteña de Estudios Penales expresó su “más profundo repudio y preocupación por los hechos de tortura”. Indagarán a los cinco policíasEl juez de Instrucción Formal de Tercera Nominación de Salta, Pablo Farah, ordenó ayer tomarle declaración indagatoria a cinco de los seis policías detenidos acusados de torturar a dos jóvenes entre septiembre y noviembre del año pasado en una comisaría, según informaron fuentes judiciales. Según las fuentes, la medida es para darles la posibilidad a los efectivos, acusados de apremios ilegales, de ver el video de los hechos que tuvieron lugar en una comisaría de la localidad de Güemes.Los efectivos quedaron imputados la semana pasada, cuando trascendieron las imágenes, que originaron una denuncia del Ministerio de Seguridad de la provincia.Los cinco policías detenidos fueron identificados como el oficial Matías Eduardo Cruz, el sargento Marcos Gabriel Gordillo y sus subalternos Héctor Raúl Ramírez, Leonardo Esteban Serrano y Alberto Antonio Ontiveros. El sexto es Barrionuevo, quien negó haber realizado las filmaciones. En tanto, las víctimas son Miguel Angel Martínez y Mario Luis Rodríguez, que tenían 17 y 18 años cuando ocurrieron los hechos. Los familiares de este último declararon que no fue la primera vez que el joven fue agredido por los policías de esa comisaría. “Desde hace mucho tiempo lo venían golpeando aunque él no hubiera hecho nada. Lo llevaban al río Mojotoro, lo golpeaban y le decían que no diga nada, lo amenazaban”, aseguró Beatriz Palacios, madre de Rodríguez.




Discussion about this post