POSADAS. Una nena de cuatro meses de vida fue rescatada de la casa en que vivía, donde estaba condenada prácticamente a un estado de abandono. Fuentes del caso indicaron que, al parecer, presentaba un principio de desnutrición.El caso trascendió el domingo, alrededor de las 18.30, cuando una vecina se presentó en la Comisaría de la Mujer, dependiente de la Unidad Regional X. Allí contó que una vecina, adolescente de quince años, le ofreció entregarle su hija.“O la agarras o la tiro”, le habría manifestado, poniéndola en una encrucijada que jamás imaginó experimentar.Tal fue la insistencia de la joven, que hasta le habría asegurado que “el martes -por hoy- te traigo el papel rosado”.Sumamente preocupada, se trasladó hasta la dependencia policial y pidió asesoramiento.Personal especializado se trasladó hasta el domicilio de la adolescente, en el populoso barrio A-4, y rescató a la criatura, sobre todo en forma preventiva y por precaución.Con posterioridad, se dio intervención al defensor de Familia actualmente en turno.Este habría dispuesto que la madre, la criatura, la abuela y la vecina a la que ofrecieron la pequeña sean llevadas hoy hasta el Juzgado.Después de la entrevista que se desarrollará allí, se definirán los pasos a seguir. Según pudo establecer este diario, en un principio la beba quedó al cuidado de la vecina.En el procedimiento intervino personal de la Comisaría de la Mujer, que se trasladó hasta el domicilio denunciado. Allí se procedió a efectuar un relevamiento socio-ambiental, que estableció un estatus de vida plagado de necesidades insatisfechas.Un caso similar sucedió también en la localidad de Dos de Mayo, donde una mujer denunció que su hija tenía abandonada a su pequeña beba, de seis meses, y que la sometía a constantes malos tratos.La denunciada, de 18 años, al contrario de lo que sucedió con el caso del barrio A-4, terminó detenida, a disposición de la Justicia penal, vinculada con una causa por lesiones.El caso trascendió el domingo, alrededor de las 14, cuando la madre de la pequeña abandonó la casa y dejó a esta llorando.Sucedió en el paraje El Saltito I. La denunciante narró a los uniformados que su hija golpeaba a la niña con una ojota o con una varita para que dejara de llorar. Ni siquiera la aseaba.





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