BUENOS AIRES (NA). La Argentina pagará con reservas del Banco Central unos 5.716 millones de dólares de deuda cuyos vencimientos operarán en agosto y diciembre, y corresponden al Boden 2012 y al cupón atado al PBI, confirmó la presidenta Cristina Kirchner. “Si Argentina quisiera, podría cancelar su deuda en moneda extranjera con las reservas”, lanzó la jefa de Estado y precisó que el volumen global de las obligaciones “representa hoy el 42% del PBI” y antes de la reestructuración ese porcentaje llegaba al 130.La mandataria resaltó que durante la reciente Cumbre del G-20, en México, le confirmó a los presidentes de los países en los que hay acreedores de la Argentina que el país cumplirá con sus compromisos externos “como lo viene haciendo desde 2003”. “Les dije a los presidentes que en agosto vamos a terminar con el corralito”, sostuvo la mandataria en referencia al pago del Boden 2012.Precisó Cristina que durante los primeros días de agosto se abonarán unos 2.281 millones de dólares, equivalentes a unos 10.330 millones de pesos. En cadena nacional desde Casa de Gobierno, la jefa de Estado garantizó que en diciembre el Gobierno volverá a utilizar reservas internacionales del Central para pagar el cupón del PBI, por unos 3.435 millones de dólares, equivalente a unos 15.560 millones de pesos. Los denominados cupones ligados al PBI son títulos de deuda emitidos en el 2005 durante la reestructuración de la deuda que había caído en default en 2001.Estos bonos son pagados en diciembre del año siguiente por lo que a fines de año serán abonados los correspondientes al 2011, cuando la economía argentina tuvo un crecimiento cercano al 9%. “Argentina nunca negó su deuda”El embajador argentino en Estados Unidos, Jorge Argüello, salió al cruce de una nueva embestida de los “fondos buitres” agrupados en la American Task Force Argentina (ATFA) y aseguró que el país “nunca repudió su deuda” externa.“La Argentina nunca repudió su deuda e hizo sacrificios extenuantes en su compromiso por encontrar una solución a la cuestión de la deuda”, sostuvo Argüello, quien replicó así un artículo periodístico publicado por uno de los líderes de ATFA, Robert Shapiro, en un medio estadounidense.Shapiro, calificado por Argüello como uno de los “principales promotores de fondos buitres” en Estados Unidos, señaló que “la Argentina siempre ha desestimado su obligación de reembolsar los prestamistas e inversores estadounidenses, y de otros países extranjeros”.En su artículo en “The Hill”, una de las más tradicionales y prestigiosas publicaciones de Washington, titulado “Argentina y la diplomacia del default”, Shapiro planteó, además, que al país “le tomó cuatro años emitir una oferta de reestructuración, y cuando finalmente llegó en 2005, la mitad de los inversores extranjeros lo rechazó”.También dijo que “el gobierno de Néstor Kirchner repudió todas las obligaciones pendientes”, en cuanto a la deuda externa, lo que provocó que surgieran “cientos de demandas” por parte de Estados Unidos y otros acreedores extranjeros.





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