Apareció el abuelo secuestrado y detuvieron a tres de sus familiares

POSADAS. Finalmente, el caso del abuelo de 87 años que en la tarde del lunes había sido secuestrado de un geriátrico por sus propios familiares llegó a un final ayer por la mañana, cuando esos cercanos se presentaron en la fiscalía del Juzgado de Instrucción 7 y aseguraron que el anciano está bien. No obstante, por orden judicial fueron detenidos en forma preventiva dos nietos y el marido de una nieta del anciano, bajo sospecha de “violación de domicilio, daños y lesiones graves (dos hechos)”, indicó un vocero oficial. Tal como se publicó, la historia comenzó alrededor de las 18 de ese día en un hogar geriátrico de San Marcos al 4000, en el popular barrio de Villa Urquiza, cuando unas diez personas irrumpieron en tres automóviles e iniciaron un verdadero combate para llevarse al octogenario.IrasciblesSegún las fuentes, ante la negativa de enfermeros y otros empleados del lugar, los irascibles familiares primero tiraron abajo un portón con uno de los vehículos. Entonces, lograron ingresar al predio e iniciaron una frenética carrera hasta la habitación del abuelo, en la que hubo agresiones al personal del geriátrico.A tal punto llegó la violencia que una de las responsables del hogar denunció a uno de los jóvenes del grupo -sería nieto del anciano- por lesiones graves, ya que aparentemente le habría fracturado la clavícula. Otros empleados también resultaron con lesiones de distinta consideración.El hecho generó alarma y efectivos de la comisaría seccional Tercera trabajaron durante toda la noche para ubicar al abuelo y sus secuestradores.Se presentaron en el JuzgadoSin embargo, recién en la mañana de ayer todo se resolvió cuando los familiares se presentaron en la fiscalía de Instrucción 7 y aseguraron que el anciano se encuentra bien y que todo se debió a problemas de índole familiar con otra de las hijas del hombre. De todas maneras, la Justicia ordenó en las últimas horas de ayerla detención de dos nietos del abuelo y el marido de una de sus nietas, por “violación de domicilio, daños y lesiones graves (dos hechos)”, precisó un portavoz del caso.