Por la 36ª fecha del Toneo Nacional B, Guaraní Antonio Franco recibió este lunes a Atlético Paraná, en un encuentro donde ya no podía permitirse perder puntos para quedarse una temporada más en la segunda división del fútbol argentino.A pesar de verse superado en el juego por la visita durante buena parte del trámite, la Franja sacó un resultado más que positivo: un 2 a 0 que sólo se ve empañado por las lesiones de dos "fijas" en el equipo: el goleador Cristian Barinaga y Lautaro Formica.A los cinco minutos, la "Franja" tuvo una inmejorable ocasión de adelantarse en el marcador, pero el remate de Luciano Leguizamón a la salida de un tiro libre fue milagrosamente rechazado por el arquero visitante Ignacio Arce y despejado después por Martín Galli. Sin embargo, poco a poco los entrerrianos fueron haciendo pie y, cerca de los 20, Guaraní se salvó tras un lanzamiento de Atlético Paraná que se estrelló en el travesaño y no entró en el arco por muy poco. Luego, a los 25, un error de cálculo del arquero Federico Cosentino provocó una nueva ocasión de riesgo contra el dueño de casa que por suerte la visita no supo capitalizar.Apenas segundos antes, Cristian Barinaga había abandonado la cancha por una nueva lesión y fue reemplazado por Miguel Alba.La jugada clave de la primera mitad llegó en el minuto 42, cuando el árbitro cobró un penal favorable a Guaraní por manos del defensor entrerriano Ricardo Stechina (parecían involuntarias) que Leguizamón cambió por gol.El complemento se inició también con dominio visitante, pero cada vez con más nervios y menos fútbol. Por eso, la primera ocasión volvió a ser para el local, con una llegada de Alba cuyo centro no llegó a rematar ninguno de los dos delanteros franjeados que entraban: Leguizamón y Sagarzazu.Sin embargo, como en la primera mitad, enseguida volvió a sufrir Guaraní, por culpa de Lisandro Alzugaray, que sacó un poderoso disparo que se desvió en el "Chino" Benítez y salió rozando el poste.En el ecuador del complemento, la Franja sufrió una nueva baja: Lautaro Formica se retiró lesionado y su lugar lo ocupó Maximiliano Zbrun, por lo que Sagarzazu se tuvo que emplear como marcador de punta. La dupla Zuccarelli-Zuccarelli agotó poco después los reemplazos, con el ingreso de Rodrigo Bareiro por Leguizamón. A partir de ahí todo fue golpe por golpe, entre el empuje entrerriano y los incisivos contraataques posadeños que a punto estuvieron de terminar en la red en varias oportunidades, sobre todo en la cabeza y los pies de un incisivo Pablo Ostrowski, que tras errar varios goles "cantados", pudo tomarse revancha en tiempo adicionado y establecer el 2-0.





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