Las derivaciones de un doble homicidio perpetrado en Los Helechos, donde una mujer y su hijo fueron ejecutados a balazos, conduce por estas horas a la Policía hacia una pista vinculada con la denominada Masacre de Panambí, comuna en que Carlos Knack, su esposa Graciela Mojsiuk y los hijos de ambos, Bianca y Cristian, fueron quemados vivos.Los cuatro, sucesivamente, murieron como consecuencia de las gravísimas lesiones que padecieron.Las víctimas en el paraje Samambaya, jurisdicción de Los Helechos, fueron ejecutadas a balazos sin ninguna chance de sobrevivir, a sangre fría y con una crueldad poco común en la zona.Lidia Bezus de Kosakzuk, de 69 años, fue eliminada de un disparo en la frente. Su hijo, Diego, de 29, presentaba dos orificios de bala: en el pecho y en el rostro. Ambos estaban indefensos cuando los remataron con un revólver calibre 22.El doble crimen se produjo el 16 de julio pasado. Cuando la Policía arribó al lugar, se encontró con los cuerpos diseminados en distintos puntos de la vivienda.En un principio se barajó la teoría de que se habría tratado de un potencial “ajuste de cuentas”; luego se especuló con la hipótesis de un robo que terminó de la peor manera, cuando Bezus de Kosakzuk identificó a uno de los ladrones. Entonces decidieron ultimar a las víctimas antes de que los denunciaran en la Policía.Sin embargo, la estrategia no les sirvió de mucho. Los investigadores no tardaron en averiguar que Diego Kosakzuk había sido testigo, meses antes, en una causa por robo de yerba mate iniciada contra uno de los hombres que luego sería arrestado por su vinculación con los asesinatos.Con la detención de este sospechoso, identificado como Miguel, la caída de los otros dos involucrados era cuestión de tiempo. Y así fue. A Miguel se sumaron “El Tuerto” y Sergio Alejandro.El primero, contra el que Diego Kosakzuk testificó, habría sido quien aportó el dato de que tenían dinero en la propiedad, producto de la venta de pinos. “El tuerto” habría sido el que sumó a Sergio Alejandro a la planificación y ejecución del asalto. Este, a su vez, es sindicado, por estas horas, como el hombre que ejecutó a la mujer y a su hijo en Los Helechos.Fuentes de la pesquisa contaron a PRIMERA EDICIÓN que Bezus de Kosakzuk intentó escapar. Al ver cómo mataban a su hijo, cerró la puerta en un intento desesperado por salvar su vida, encerrándose en algún sector de la vivienda. Pero el homicida la tumbó a patadas, ingresó y la remató de un balazo en la cabeza.Justamente, esta arista impiadosa de la personalidad de Sergio Alejandro, sumada a que en su momento trabajó y era vecino de la familia Knack, en Panambí, llevó a los detectives a ampliar la investigación y poner la lupa sobre él como posible entregador de la familia a la que mataron el 25 de mayo del año pasado.El dato es revelador y alienta la esperanza de cumplir con lo que, en su momento, ordenó la Cámara de Apelaciones en lo Penal y Correccional de la provincia, cuando confirmó el auto de prisión preventiva dispuesto contra los imputados Marcial Venicio Alegre (46), Juan Ramón Godoy (45) y el exprefecturiano Pablo Julio Paz (52).El Alto Cuerpo confirmó lo que en su momento indicó la instrucción, de que al menos otros dos asesinos participaron en la masacre.
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