Comenzó ayer en oberá el debate oral y público por la muerte a puntazos de Omar Héctor Martínez (24), en marzo de 2015 en El Soberbio. Anderson Martínez (19) apuntó a Miguel Castro (23) como el autor de las puñaladas. Otros tres testigos ratificaron esa versión. El imputado está en el banquillo junto a su hermano, Luis (25). 
Un torneo de fútbol colonial, una fiesta y el peor final. La secuencia que antecedió al crimen a puñaladas de Omar Héctor Martínez (24) es parte del misterio que comenzó a desentrañarse ayer en la sala de audiencias del Tribunal Penal 1 de Oberá. En ese recinto, claro, también se buscará determinar el grado de responsabilidad que tuvieron en el hecho Miguel Ángel Castro (23) y su hermano, Luis Ederson Castro (25).
Desde el banquillo de los acusados, los dos jóvenes rompieron el silencio y se dijeron inocentes del sangriento episodio que conmovió a El Soberbio en la noche del domingo 22 de marzo de 2015. Sin embargo, los cuatro testigos que hablaron luego apuntaron directamente a ellos como los autores del homicidio simple.
Así lo atestiguó PRIMERA EDICIÓN en el inicio del debate oral y público que se lleva adelante en la sala de audiencias de la calle Nueve de Julio al 700 y que, tras esa primera jornada, pasó a un cuarto intermedio hasta hoy a las 8.30.
Nunca le hice nada a nadie
La primera jornada se inició alrededor de las 8.50 de ayer con el relato del hecho por parte de los magistrados Lilia Avendaño, José Pablo Rivero y Francisco Aguirre. Esa lectura, proveniente de la investigación realizada durante la instrucción, conmovió a los familiares de Martínez, la víctima, presentes en la sala de audiencias.
Tras escuchar atentamente la acusación que pesa en su contra, los hermanos Castro resolvieron declarar. El primero en enfrentar el micrófono fue el más joven, Miguel Ángel, quien luego resultaría el más comprometido en base a lo expuesto por los testigos.
El imputado aseguró que aquel día volvía en moto de la fiesta que realizaba la Liga de Fútbol Colonial -que nuclea a numerosos equipos de El Soberbio y la zona- cuando al pasar por enfrente de un grupo en el que habrían estado los hermanos de la víctima comenzó a recibir insultos.
El episodio tuvo lugar en la avenida Costanera de El Soberbio y, pese a la acusación, Castro aseguró que fue rescatado por su hermano y que ambos se alejaron del lugar en motocicleta.
Yo nunca le hice nada a nadie, no tengo nada que ocultar, refirió el imputado, quien reconoció que tenía problemas con Martínez y sus hermanos, pero que nunca pasaron a mayores.
Hasta el día de hoy me pregunto por qué me tenían bronca, dijo, tras relatar una serie de supuestos hechos de bullying o acoso que se remontan a la época en que asistían a la escuela.
Sobre el hecho en sí, Miguel dijo que en esa pelea en avenida Costanera solamente se defendió con un casco del ataque de Anderson Martínez, hermano del fallecido. Nunca pensé en hacerle una maldad a nadie. Nunca porté un arma, finalizó.
Mucho más corto fue el testimonio de su hermano Luis, quien aseguró que aquella noche fue a encontrarse con un amigo a la Costanera y, de repente, se encontró con que su hermano era agredido por los Martínez.
Le estaban pegando entre muchos, aseguró, y dijo que intercedió por ayuda y logró liberar a su hermano para luego escapar en moto de la escena. Yo nunca le toqué a la víctima, no tenía motivos para hacerle algo, lanzó.
Vi que Miguel sacaba el arma
Anderson Anyi Martínez (19), el joven señalado por los Castro y hermano de la víctima, tenía 16 años al momento del hecho. Tras la declaración de los imputados, brindó su testimonio ante los jueces y contó lo contrario: dijo que los acusados llegaron a la escena e iniciaron el pleito fatal.
Llegaron preguntando por un primo, dijo sobre Luis Castro. Aseguró que ese joven, con quien incluso había compartido parte de la noche en la fiesta, le propinó un golpe. Aquello fue el inicio del pleito fatal, del que Anderson recordó escenas clave. Yo escuché que decían cuidado y ahí pude ver cuando acuchillaban a mi hermano. Vi que Miguel estaba sacando un cuchillo. Yo vi todo, refirió, tras lo cual aseguró que mi hermano nunca me contó sobre problemas con los Castro, sí sabía que tenían problemas con uno de nuestros primos.
También aportó su testimonio otro de los hermanos de Omar Héctor, Emerson?(24). Recordó que se había retirado unos minutos del lugar para comprar cigarrillos en un kiosco emplazado a cincuenta metros de la escena. Al regresar se topó con la trifulca. Nosotros nunca cargamos un arma.?De mi grupo nadie tenía cuchillo.?No los vi a los Castro porque no estaban con nosotros, aseguró.
El de blanco tenía el cuchillo
En tercer turno declaró Valdir Mucke (41), vecino de Puerto Paraíso, quien también comprometió a los hermanos, especialmente al menor de los Castro.
El hombre dijo haber visto el pleito y recordó que Miguel Castro tenía un cuchillo. En ese sentido, aseguró que tomó un palo y se metió en la pelea con el fin de separar a los contrincantes.
El más chico de los Castro saltó encima mío y me quiso acuchillar. Le pegué con el palo en la mano que tenía el cuchillo, respondió Mucke al momento de explicar cómo logro zafar de las agresiones, tras lo cual ratificó: El más chico tenía el cuchillo, lo recuerdo porque cuando me acerqué, ligué una trompada del más grande. El único que vi con armas es el más chico, reiteró.
El cierre de la jornada estuvo a cargo de José Mucke (29), hermano del anterior testigo y conocido de los imputados. Él también atribuyó las cuchilladas a Miguel Ángel Castro.
El tal Ángel se le fue arriba a Valdir con intención de acuchillarlo, pero ahí mi hermano se defendió con un palo, ratificó, en relación con lo contado minutos antes por el otro testigo.
También recordó que vio a Luis Castro aguardando en una motocicleta por Miguel. El que tenía el cuchillo era el que estaba vestido de blanco, subrayó, en relación con el menor de los involucrados.
Tras esos testimonios, los jueces resolvieron llamar a un cuarto intermedio hasta las 8.30 de hoy, cuando se reinicie el debate. En principio está prevista la presencia de más testigos. Todo indica que será necesaria una tercera jornada, en fecha a confirmar, para los alegatos y el fallo de los magistrados.
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