Algunas parejas decidieron romper con la imagen negativa del martes 13 y dar el sí, no tanto por hacerle frente a la “mala suerte de esta fecha”, sino por seguir a su santo, San Antonio, el doctor de la Iglesia católica y protector de los enamorados, ya que casualmente también coincide que se trata de su día. En la Sala Única de Matrimonio de la capital provincial, sellaron su unión Juan Forés y Graciela Luty tras 17 años de relación con una emotiva ceremonia en compañía de familiares y amigos, convirtiéndose en los únicos novios que contrajeron nupcias en ese turno.A pesar de que “se ha disminuido el número de parejas que contraen matrimonio”, según comentaron los encargados de oficiar la ceremonia, aún existen novios que celebran su amor en festejos que se organizan con anticipación. La pareja contrayente afirmó a PRIMERA EDICIÓN que “suspendimos cuatro veces el casamiento por cuestiones de salud”, pero al momento de elegir una nueva fecha en el registro agradecieron hacerlo en el día de su santo ya que su familia “es muy creyente de él (San Antonio)”. Al indagar sobre por qué la admiración por el santo, Forés recordó que “nací en Oberá, es el patrono de mi ciudad natal, además la familia materna de la ‘nona’ que vino de Italia lo único que se trajo fue una figura de San Antonio, que siempre protegió a los matrimonios de la familia”. La funcionaria del Registro Provincial de las Personas que tuvo a su cargo el protocolo, en sus palabras de aliento apeló a la figura de la familia “como el pilar fundamental” sobre el cual se apoya la sociedad y que permite la convivencia, gracias a los “valores y principios” que permiten la paz en una vida organizada. La unión entre la pareja en el último martes 13 quedó oficializada tras un compromiso de “un proyecto de vida en común, que permita la cooperación constante y la asistencia mutua”, entre aquellos que decidieron este camino. Sólo hubo dos casamientos confirmados en el ámbito de Posadas y el que se efectuó por la mañana “completó el acta número 301, del total de uniones que celebraron hasta la fecha en lo que va del año en ese turno”. La jefa de la Sala Única de Matrimonio, Mirta Jara, en diálogo con este diario aclaró que “la cantidad de casamientos varían por determinadas circunstancias, este año hubo menos matrimonios, en 2016 para esta época ya teníamos aproximadamente unas 450 actas”. Aunque por la mañana y por la tarde tienen distintos responsables en el registro, asegura que “por la tarde tendrán una situación similar, deben estar cerca de los 200 matrimonios realizados en lo que va del año”. Nuevas familias La imagen de las parejas y la tradición de los casamientos están en una etapa de cambio, no se vive el mismo panorama que en épocas anteriores pero la ceremonia sigue vigente. “Vivimos un momento en el cual atravesamos una transformación tanto en la familia como en los matrimonios, por ejemplo con los matrimonios igualitarios que son ceremonias que suelen ser muy emotivas con la concurrencia de muchas personas queridas y una gran emoción por parte de los contrayentes, que en muchos casos ya tienen hijos y están ensamblando una nueva familia; hasta ahora tuvimos dos casamientos de parejas del mismo sexo, uno masculino y otro femenino, también disminuyó de lo que fue en años anteriores pero creo que mucho influye la sociedad, son pocas las parejas que se animan por el prejuicio que aún hay en esta ciudad”, detalló Jara. En cuanto a las edades de los contrayentes que ser acercan al registro, “se ven de toda franja etaria, hay parejas jóvenes y otros que ya son más adultos. En promedio, entre 30 y 40 años”, reveló. Fotos: J.C. Marchak





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