Laura Rosa Fritd recordó el momento en el que decidió dedicarse a la medicina. Tenía cinco años cuando llegó a su escuela el camión de Catastro para detectar a personas que padecían de tuberculosis, porque en ese momento había una gran epidemia en la provincia. “Fui detectada con una tuberculosis pulmonar. Partí al hospital y ahí conocí a un médico con una luz inmensa, el doctor Giorgiaris”. Fue él quien la atendió durante dos años. “Simplemente al verlo, con tanto cariño y contención me inspiró profundamente ser médica. Yo era de familia humilde, fui a estudiar medicina y me comprometí conmigo misma y en silencio a volver a esta provincia a trabajar en el Madariaga. Le agradezco a la Provincia porque me salvó la vida y hoy me premió”, dijo Laura emocionada, acompañada por su hija Valeria Spinelli, quien acaba de terminar sus estudios en oftalmología en la Capital Federal y se apresta a volver a la provincia, a trabajar aquí, como su mamá. Laura, médica cirujana especialista en oftalmología, fue una de las doce mujeres galardonadas por su trayectoria con el premio “Marta Teodora Schwarz”, instituido por la Cámara de Representantes para reconocer a mujeres que hicieron aportes significativos al servicio de salud. Como el caso de Norma Vicente, que nació y se formó como médica en Córdoba. En búsqueda de la especialización en pediatría llegó a Misiones y “esta tierra colorada, verde, hermosa y con gente mansa me recibió, me acogió y me ayudó en los momentos más difíciles”. Fue jefa del servicio de pediatría del Samic de Eldorado y al día de hoy cuenta 34 años de servicio. “El hospital ha sido para mí, en muchos momentos, contención”. Ana Robledo, otra de las galardonadas, es jefa del sistema de fortalecimiento prestacional del Instituto de Previsión Social (IPS). Conoce el instituto como la palma de su mano porque trabaja allí desde 1986. Su trabajo incansable y compañerismo le valieron la nominación y el reconocimiento.Rosa Beatriz Rasftopolo, conocida como “Rosita”, tenía solo 18 años cuando comenzó a trabajar en la salud pública de Misiones. Con edad para jubilarse sigue ahí, trabajando con las generaciones más jóvenes de compañeros. “Es importante que te guste lo que hacés, solo de ese modo el hombre puede asumir el compromiso”, aseguró esta mujer que se definió como una “humanitaria a rajatabla”. El vasto currículum de Graciela Krieger le valió este reconocimiento. No es para menos. Es médica cirujana, posee un posgrado de especialización en enfermedades infecciosas, una maestría en gerenciamiento y administración de servicios de salud y también una especialidad en medicina legal otorgada por el Colegio Médico de Misiones, entre otros logros. “Me quiero jubilar, no tengo la edad pero sí 33 años de servicio. Cuando me preguntan qué voy a hacer, les respondo que voy a seguir trabajando, como siempre lo hice”, aseguró. “Sigo yendo al hospital porque cuando no voy, me siento mal”, aseguró Blanca Cuevas, más conocida como “Blanquita”. Cómo no va a ir si es como su casa. El Hospital de Puerto Iguazú recibió a esta enfermera con apenas 25 años y 50 después, ya jubilada, sigue siendo el lugar donde se siente indefectiblemente como en casa. Desde sus jóvenes 25 se ocupó de la atención, con el tiempo se especializó en obstetricia y fue responsable de cientos de nacimientos. Siempre luchó por los derechos de los trabajadores de la salud, fue delegada de sus compañeros y hoy, ya en el sector pasivo, sigue con su actividad gremial. Silvana Salvatierra nació en Resistencia, Chaco. Llegó a Misiones en 2005 para hacer su residencia y no se fue más. Es médica clínica y en la actualidad se desempeña como directora médica del Sanatorio Caminos. Además, todos los días al mediodía toma el colectivo y se va hasta el Caps 8 de Rocamora donde realiza tareas asistenciales y donde “soy plenamente feliz”.Norma Beatriz Miño es licenciada en trabajo social y se define como “una militante de derechos por una sociedad justa, equitativa, accesible e igualitaria donde cada uno se respete, se tolere, se valore y valore al otro por ser persona”. Su actividad diaria como referente en la provincia del Programa de salud sexual, ejecutado por Salud Pública, y su compromiso le valieron el reconocimiento. “Esto no es solo vocación, es poner todo a favor del paciente y su familia”, aseguró María Eva Gómez, doctora en medicina y cirugía con especialidad en pediatría. María fue médica de planta permanente en el Hospital de Pediatría desde 1992 hasta agosto de 2016. En esa época se especializó en nefrología pediátrica. “Muchísimas gracias por acordarse de mí. He puesto todo de mí”.“Trabajábamos sin franco, sin descanso, no podíamos darnos el lujo de dormir o comer tranquilas”. El relato es de Mabel Rodas. Es un recuerdo de sus días como enfermera civil en el Hospital Naval de Puerto Belgrano, en plena guerra de Malvinas. Su trabajo como enfermera le valió el reconocimiento a esta mujer de Campo Viera, que trabajó en la Armada Argentina y fue voluntaria de la organización internacional Médicos Sin Fronteras y de la Cruz Roja Argentina. “Vivir una experiencia en un escenario de guerra no es lo mismo que asistir a un accidentado como la mayoría de los enfermeros o médicos estamos acostumbrados”. En la actualidad, Mabel relata su experiencia en la contienda en escuelas rurales, centros vecinales, aldeas guaraníes de la provincia, a quienes ayuda gracias a lo que recolecta en su propia feria. “Este reconocimiento es la mejor medicina que podemos percibir. Es muy gratificante”.Liliana Chumen es médica pediatra, oriunda de la ciudad de Buenos Aires. Llegó a Wanda en 1987 donde encontró esa vocación por el servicio que marcaría su vida. “Trabajar en salud pública no es sentarse detrás de un escritorio y tirar recetas. Nuestro perfil tiene que ser sentarse en un tronco, acariciar un niño desprotegido, darle un abrazo, caminar cada casa que pertenezca a nuestro centro de salud y extenderlo más allá si hay necesidad”.Sonia Lindstrom es docente jubilada, actualmente presidenta del Hogar de Madres en Tránsito. Ejerció la docencia y participó en la creación de escuelas donde se daban clases de costura y cocina.El reconocimientoMarta Teodora Schwarz fue la primera y única mujer médica subsecretaria de Salud y ministra de Salud Pública de Misiones. Luego de ese cargo se dedicó a la dirección del Hospital de Iguazú, que hoy lleva su nombre.Fotos: M.Fedorischak





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