La fiscal encargada del caso, Lorena Ledesma, imputó al comisario por haber cometido el delito de inducción a un subordinado a incurrir un hecho punible, y también a un agente que disparó balines de goma en el interior de la sede, en la que había personas.Los hechos ocurrieron tras las protestas violentas acaecidas en la capital paraguaya el 31 de marzo, que resultaron en el incendio parcial del Congreso, más de 200 detenciones, decenas de heridos y la muerte en la madrugada de Rodrigo Quintana, de 25 años, cuando los uniformados entraron en la sede opositora.La Fiscalía indicó que Paredes lideró el grupo de la división de Investigación de Delitos y les ordenó entrar por el garaje del local, mientras una brigada de antidisturbios accedía por la puerta principal.El primer efectivo antidisturbios que entró por la puerta principal, según las imágenes del video del circuito cerrado de la sede del Partido Liberal, fue Gustavo Florentín, oficial imputado por presuntamente ser el autor del disparo de escopeta con bala de plomo que hirió de muerte a Quintana.En cuanto a Paredes, el Ministerio Público sostuvo que ordenó a sus agentes "verificar el interior del patio y sus respectivas habitaciones, para realizar la aprehensión de las personas que se hallaban en el lugar", según informó la Fiscalía a través de un comunicado citado por la agencia de noticias EFE.Durante ese registro, aparentemente envió a un subordinado a romper el cristal de la puerta del baño de mujeres, introducir el cañón de su escopeta y disparar balines de goma contra las personas del interior.La Fiscalía explicó que, de acuerdo a su "larga experiencia policial", Paredes habría "consentido" esa práctica a sabiendas de que esos disparos podrían "causar lesiones que provoquen la muerte de al menos una persona" de las que se encontraban dentro.En cuanto al otro imputado, el agente antidisturbios Guido Amarilla está acusado por la fiscal Ledesma por el delito de tentativa de homicidio doloso por haber realizado disparos de balines con su escopeta en el interior de un aseo en donde había personas.Las imputaciones se suman a la de Florentín, quien debía encontrarse bajo arresto domiciliario aquel día porque cumplía una pena por presunta violencia familiar, pero esa tarde salió de la Comandancia de la Policía solo, armado y provisto de equipamiento como policía antidisturbios, según varios videos de las cámaras de seguridad difundidos por el Ministerio del Interior.También está imputado un agente policial acusado de haber disparado balines de goma contra el diputado liberal Edgar Acosta, que le causaron heridas en la boca por las cuales tuvo que ser hospitalizado.Las protestas se desencadenaron después de que 25 senadores aprobaran una enmienda constitucional para posibilitar la reelección presidencial, prohibida por la Carta Magna paraguaya.Tanto el presidente de Paraguay, Horacio Cartes, como el ex mandatario Fernando Lugo (2008-2012) buscan ser candidatos en los comicios de 2018, aunque la Constitución prevé mandatos únicos de cinco años y prohíbe la reelección.Entretanto, la Justicia rechazó el amparo constitucional presentado la semana pasada por el presidente del Congreso, Roberto Acevedo, que buscaba que el polémico proyecto de enmienda constitucional para facultar la reelección presidencial no sea tratado en la Cámara de Diputados.La jueza encargada, María Rosa González, dictaminó que el amparo "no es la vía procesal" tras argumentar que "los actos emanados de los Poderes Públicos gozan de presunción de legitimidad y para contrarrestar estos efectos es menester que se acredite la arbitrariedad del mismo o la violación de una ley para que fenezca aquella presunción".Fuente: Agencia de Noticias Télam





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