El lamentable estado de la terminal de ómnibus de Puerto Rico es una de las grandes contradicciones con las que ha debido lidiar la ciudad en los últimos años. Destacada en su historia por su belleza, orden y limpieza, la terminal ha sido una piedra en el zapato con la que muchos vecinos han sabido convivir. Pero todo parece indicar que a la paciencia y la espera no le queda mucho hilo en el carretel.Durante la anterior gestión municipal, a cargo de José Dieminger, se inició un proyecto de terminal nueva sobre la avenida Alejo Rauber, para la que incluso se construyó un nuevo acceso asfaltado desde la ruta nacional 12, que lleva el nombre Presidente Raúl Ricardo Alfonsín, o más conocido por los vecinos como “Acceso Norte”. Pero luego de que cambiara la dirigencia política de la Municipalidad en el año 2011, la actual administración a cargo de Federico Neis, no ha podido terminar el proyecto ya avanzado de terminal nueva, ni ha generado los mantenimientos necesarios de la vieja (actual), ubicada sobre la avenida 9 de Julio. Es más, ese predio en el que se encuentra la actual terminal, ya no es de la Municipalidad, pues ha sido donado al Superior Tribunal de Justicia, a fin de que se construya en el lugar un Edificio de Tribunales. Por lo que la propiedad ya no pertenece al Municipio, pero este, a pesar de no realizar los mantenimientos básicos, sí sigue cobrando por los alquileres de los locales de las boleterías y el bar. Es más, en los últimos meses ha aumentado el costo de los mismos a pesar de la queja de los locatarios por el mal estado de los techos y de los baños. Pero la promesa del intendente Neis es terminar la terminal nueva, cosa que no ha ocurrido en cinco años de gestión, en tanto la actual se sigue deteriorando a puntos intolerables. Por esta razón, varios vecinos realizaron una queja ante el concejal de Cambiemos, Hugo Wolfart, quien volcó esas inquietudes en un Proyecto de Comunicación (24/16) al Poder Ejecutivo, debido al “estado general de la actual terminal de ómnibus”, “estado en particular de los sanitarios”, “la preocupación de los concesionarios de boleterías y bar”; y la inquietud manifestada por varios vecinos, visitantes y usuarios”. El proyecto, ingresado en la última sesión y aprobado por unanimidad, considera que: “aún no se encuentra operativa la nueva terminal, que las obras edilicias y de acceso a la nueva terminal demorarán su puesta en funcionamiento, lo que implica seguir utilizando la actual por dicho período, que es necesario mantener un servicio mínimo pero adecuado a los usuarios, y que una terminal de ómnibus es la primera imagen/foto que se lleva todo visitante transitorio que pasa por la ciudad, es que se vería con agrado que el Departamento Ejecutivo Municipal adopte los recursos necesarios a fin de efectuar las mejoras mínimas, tendientes a brindar y mantener: sanitarios en condiciones, como así también en el sector de espera de pasajeros; y, reparar los techos en zona de boleterías que hoy evidencian graves problemas de filtración de agua, como así otras tareas de imagen, higiene, mantenimiento y reparaciones”.Además, hace una mención especial respecto a la seguridad, solicitándole al Intendente que “se le ofrezca a los pasajeros y usuarios una seguridad mínima”.Proyectos de este tipo ya se han presentado en diferentes ocasiones por distintos sectores, no solamente bloques de concejales sino también grupos de vecinos y nunca han tenido respuesta por parte del Poder Ejecutivo, más que promesas que no se han cumplido.





Discussion about this post