La búsqueda de una farmacia en las grandes urbes es cosa del pasado. Sin embargo, en varios municipios del interior de la provincia – sobre todo en la costa del río Uruguay- continúa siendo imposible. Esta es una problemática que esperan se pueda enmendar con <a href="http://www.primeraedicion.com.ar/nota/231874/la-legislatura-aprobo-una-ley-que-regula-la-actividad-farmaceutica-e.html">la ley recientemente aprobada</a>.El presidente del Colegio de Farmacéuticos de la provincia, Patricio Schiavo, confirmó a PRIMERA EDICIÓN que actualmente “entre quince y veinte municipios, de los 75 que existen en la provincia, no poseen servicio de farmacias. En algunos casos se cubre con botiquines, anexos que también realizan turnos y por los Centros de Atención Primaria de la Salud (Caps), que dependen del Ministerio de Salud Pública”.Es sabido que los almacenes de barrio manejan en su stock de mercadería medicinas “básicas” como paracetamol, ibuprofeno o antiespasmódicos, pero a partir de la puesta en vigencia de la norma no podrán expender más los mismos. “El faltante se da básicamente en la zona del Uruguay, Este y Noreste de la provincia, donde también se ubican localidades muy pequeñas, colonias o asentamientos incluso, que no tienen farmacias pero sí servicios muy cercanos”, sostuvo el presidente del Colegio.Schiavo aclaró que son múltiples las causas por las que las farmacias no se asientan en estos lugares. Una de ellas es “la poca demanda o porque son localidades cercanas a una grande o también porque las necesidades fueron satisfechas por los Caps”. Es por eso que Schiavo subrayó que el Colegio apoya fuertemente esta ley, para que entonces las farmacias estén perfectamente distribuidas y no haya aglomeramientos, “como pasa en las grandes localidades, en Posadas u Oberá, por ejemplo, donde tenemos gran cantidad de farmacias pero prácticamente todas en el casco céntrico”.Añadió que “nosotros no nos metemos tanto en la parte comercial, sino que tratamos que la distribución sea equitativa en todos los lugares, que todos tengan las mismas posibilidades de crecer, tanto si se instalan en el centro de la ciudad como en la periferia”.Caps: atentos, pero no tantoEn su mayoría, los Caps no cumplen guardias de 24 horas. Por ejemplo, el que se encuentra en Villa Industrial, atiende a una importante población de las colonias vecinas a Alem pero sólo cuenta con atención de lunes a viernes, por la mañana y hasta primera hora de la tarde.Igual situación se refleja con la sala de primeros auxilios de la picada Yapeyú, distante a alrededor de quince kilómetros de Oberá. “Entendemos claramente que no estamos capacitados para vender medicamentos. Incluso prácticamente no tenemos ganancia, al contrario, traemos lo básico de las farmacias del pueblo para subsanar el problema del momento porque no podemos dejar a un chiquito con fiebre, a un vecino sufriendo hasta que pueda movilizarse para adquirir una tableta de paracetamol en una farmacia”, opinó Clara, comerciante de la zona que provee a los lugareños de insumos de primera necesidad en un pequeño quiosco. “Si tengo que dejar de traer remedios lo voy a hacer, pero entonces que alguien venga, permanezca en la zona y sienta en carne propia lo que padecen quienes no tienen medios para trasladarse hasta Oberá o Alem”, agregó.Farmacias de turnoHallar una farmacia abierta un fin de semana, un feriado o por la noche también es una tarea sencilla en las poblaciones más grandes donde, por lo general, están a disposición del público las 24 horas. Sin embargo, el cronograma de turnos no pasó a la historia y es el Colegio de Farmacéuticos el responsable de su confección, mientras que el control del cumplimiento lo realiza el Ministerio de Salud a través de la Dirección de Inspectoría de Farmacia.“Cada mes se envía a cada farmacia el cronograma, es decir, qué día le va a corresponder cumplir el turno en ese mes, con copia al Ministerio de Salud. En los casos en que haya localidades que tengan problemas, interviene el Colegio en conjunto con el Ministerio”, sostuvo el presidente del organismo.Obviamente “hay localidades pequeñas, que tienen una o dos farmacias que, lastimosamente, se reparten como diez días de turno, generalmente el farmacéutico vive al lado o atrás del comercio y realiza una atención extensa. Los municipios pequeños frecuentemente tienen también Caps en donde tratamos de reforzar, o pedirle al Ministerio que refuerce, la provisión de medicamentos a los que tienen horarios extendidos para poder satisfacer las necesidades. Pero también recordemos que al ser tan pequeños tienen menos necesidades y urgencias”, remarcó.“Básicamente la rentabilidad o lo que tenga que ver con ese tipo de cuestiones comerciales tratamos de no mezclarlas con la atención. Recordemos que la atención en la farmacia debe ser obligatoria, cuando nos recibimos sabemos que debemos cumplir con los turnos, más en las localidades del interior”, destacó Schiavo. “En Posadas y en las ciudades grandes tenemos farmacias las 24 horas, por lo que a veces no se justifica estar de turno durante la noche sabiendo que el movimiento por ahí es prácticamente nulo, pero en el interior se cumplen los cronogramas porque los requerimientos son importantes”, aseguró.Ante las denuncias en las redes sociales por falta de farmacias de turno, especialmente en San Ignacio, Schiavo manifestó que “tenemos muy pocos casos de reclamos, porque incluso los turnos pasan a ser rentables. Hay localidades donde se pelean por los turnos, sobre todo los fines de semana porque son los días que recaudan más. El último inconveniente que tuvimos fue en El Soberbio, donde intervino el Colegio ante el municipio y se solucionó con la implementación de un cronograma como correspondía”, finalizó el presidente del Colegio.La directora de Farmacia de Salud Pública, Rosana Galeano, dijo a PRIMERA EDICIÓN que “hacemos inspecciones periódicas en las localidades para ver que las farmacias de turno estén abiertas. Como farmacéuticos tenemos la responsabilidad desde el momento que prometemos el título de resguardar la salud de la población donde nos toca vivir o donde estamos ejerciendo”, sostuvo la funcionaria de salud.Agregó que “por supuesto que una persona no aguanta los 365 días del año trabajando, desde Salud Pública tenemos conocimiento de que en los municipios más chicos se refuerzan mucho las guardias de los Caps”. Aunque “también es cierto que hay localidades en las que la parte urbana es muy pequeña y la zona rural muy amplia y donde existe mucha distancia, esa es una realidad de terreno que se observa en la provincia”, concluyó.Nueva ley de farmaciasSegún la nueva normativa aprobada por la Legislatura el pasado jueves, la venta de medicamentos queda limitada exclusivamente a las farmacias, incluso los de venta libre, por lo que los comercios deberán guardar una distribución homogénea. En las localidades pequeñas deberán guardar una distancia mínima de 200 metros; en las medianas, 300 y la
s de más de 25 mil habitantes, 400 metros.Podrán instalarse hasta dos farmacias con el mismo nombre en la localidad, siempre y cuando tenga domicilio real y fiscal en el lugar. Los medicamentos no pueden ser exhibidos en góndolas para autoservicio, sino que deben ser entregados por un profesional farmacéutico. Las farmacias que trabajen otros rubros, también tendrán que habilitarlo y pagar impuestos por ello.
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