El problema se inició en los últimos días de clases de 2015. La red de agua del edificio de la Escuela 831 del barrio San Roque González, de esta localidad, comenzó con una pérdida que hace que el tanque de catorce mil litros que tiene la escuela “no aguante diez minutos con agua”. Este hecho fue determinante en la decisión que tomó la comunidad educativa: no se dictarán clases durante 48 horas. Entonces, este jueves y el viernes no habrá clases. “Esperamos durante un mes la solución por parte de las autoridades educativas”, indicó Miguel Ángel Steinhorst, director de la institución. Sucede que, desde que surgió el problema, elevaron notas contando de la problemática a las autoridades educativas, incluso en Posadas, pero no hubo respuestas. “La situación no da para más”, indicó el directivo.El problema es de vieja data. En los últimos días de clases del año pasado se produjo la rotura de un caño de seis pulgadas que pierde agua y, hasta el momento, no pudieron detectar dónde está ubicado el desperfecto. Como estaban próximos a terminar las clases decidieron hacer el reclamo a las autoridades y continuar con el dictado hasta cerrar el año lectivo. “Hicimos todo lo que pudimos y estaba a nuestro alcance. Tenemos que venir a las seis de la mañana a juntar agua en las ollas para el desayuno y juntar en tachos para tirar en los baños. Estamos cansados, queremos una solución”, dijo Steinhorst.Docentes y directivos estiman que el desperfecto está ubicado debajo de los cimientos de la escuela. “La pérdida es en la parte inferior del edificio y se ve que es grande ya que en pocos minutos se pierden más de catorce mil litros de agua, que es la capacidad del tanque elevado que tiene la escuela. Con los docentes y padres que se acercaron a ver el problema revisamos y no encontramos nada. Por eso creemos que está en la parte de abajo del edificio que fue construido con un relleno muy grande y el agua que se pierde se filtra hacia abajo. No como en otra situación que se filtra para arriba y se puede ver, como pasa cuando se rompe un caño en la calle”, ejemplificó el director.Reclamos sin respuestasEl problema pasó de manos del supervisor escolar a todos los entes y departamentos del Consejo General de Educación (CGE) encargados de atender esta problemática. “Vino gente de Posadas para ver el desperfecto. Revisaron, midieron pero se fueron y no nos dieron solución. No podemos seguir así. Cuando comenzaron las clases decidimos darle un mes de tiempo para que vengan a arreglar. Como no lo hicieron, decidimos no dar clases por cuarenta y ocho horas”, señaló Steinhorst.Sin embargo, la medida podría extenderse. “Si el lunes no hay una solución no vamos a dar clases. Los docentes vamos a estar trabajando, pero los chicos no van a venir. Los estamos exponiendo a que se enfermen y hasta se puede generar una epidemia de algo por las infecciones a raíz de no tener agua para hacer la limpieza como corresponde”, indicó Steinhorst.No es la primera vez que se rompe un caño de estas características. “Hace tres años hubo una pérdida pero vino la empresa que construyó la escuela y lo reparó. El año pasado se rompió un caño, detectamos el lugar porque era en una pared y con gente de la Municipalidad lo reparamos. En esta oportunidad no podemos descubrir dónde está”.La escuela cuenta con una cisterna a ras del piso de veinticinco mil litros de agua y un tanque elevado de catorce mil. “Cuando lo llenamos y abrimos las llaves de pasos de los caños de seis pulgadas, el agua del tanque no aguanta más de diez minutos. Si queremos tener el agua en forma permanente tenemos que poner en funcionamiento la bomba en forma continua y lo que estamos haciendo es derrochar una gran cantidad de agua potable y no queremos eso. Hasta ahora la cooperativa de agua no nos dijo nada, pero si viene y nos quiere poner un castigo tendrían razón porque es mucha el agua que se pierde”, culminó el docente.





Discussion about this post