Posadas tendrá decacharrizado permanente el resto del año

La epidemia del dengue en la provincia produjo un impacto importante en la sociedad, donde quedó muy en claro que la tarea de prevención, a través del descacharrizado y eliminación de posibles lugares de reservorio del mosquito, es el mejor método para prevenir la enfermedad. La comuna posadeña elaboró un proyecto, cuya puesta en marcha será anunciada por el intendente, Joaquín Losada, para que una vez al mes y durante todo el año, los vecinos dispongan de la posibilidad de sacar sus cacharros, que serán retirados en forma gratuita en día y horario programados por Servicios Públicos.“Hace casi un mes, cuando el gobernador (Hugo Passalacqua) decretó el asueto para que se limpien las casas y saquen toda la basura que tenían a la calle, generó que en toda la ciudad tengamos basura en las calles. En  ese momento nos llevó más de una semana poder retirarla. Desde entonces nos quedó en claro que debíamos establecer que esas mismas rutas para recolección domiciliaria, por lo menos una vez al mes la debíamos hacer para recoger los cacharros domiciliarios”, comenzó explicando el secretario de Servicios Públicos de la Municipalidad de Posadas, Héctor Rodríguez.El intendente Joaquín Losada, anunciaría en los próximos días que “los vecinos podrán sacar los cacharros una vez al mes y nosotros con camiones con caja, bateas y volcadores, vamos a retirarlos. El volumen sería menor al que sacamos por la epidemia del dengue. Para eso se establecerá un cronograma para cada sector con comunicación precisa de días y horarios”.Rodríguez reconoció que “el descacharrizado no estaba previsto en la dimensión que se hizo. Desde que arrancamos a la fecha llevamos en promedio 150 cargas de 6 m3 por día que se retiran de la ciudad, es una cifra enorme. Los vecinos tomaron conciencia que deben limpiar su casa y terreno, pero a veces lo hacen en forma desordenada, al menos hasta que logremos establecer un cronograma seguirá así. Los boulevares no son lugares donde deben dejar la basura y desacostumbrar a la gente a eso va a llevar un buen tiempo”.Parque diezmado“Cuando asumimos con lo que nos encontramos es con mucho equipamiento existente, eso es verdad, pero con varios, fundamentalmente los compactadores, que son la clave y el corazón de Servicios Públicos, con los que se hacen la recolección domiciliaria, que necesitaban ser reparados. De un total de 34 camiones teníamos sólo doce funcionando. A algunos había que hacerle reparaciones menores, a otros no tanto, pero lo cierto es que para poder realizar un buen servicio debemos tener no menos de veinte camiones en la calle”, recordó el secretario de Servicios Públicos de la Municipalidad de Posadas.Luego agregó que “desde el 11 de diciembre del año pasado hasta que pudimos tener la cantidad de equipos funcionando adecuadamente transcurrieron quince días, que fue un momento crítico porque justo era el período de fiesta y a eso se sumó el dengue. Los equipos contratados, además, habían terminado su vínculo. Lo bueno que maquinaria había, lo malo que había que repararlos”.Rodríguez resaltó que “a la fecha estamos con veinte a veintidós camiones funcionando. Hay todavía una parte del parque que necesita reparaciones mayores que se están haciendo”.Los “puntos limpios” son los más críticosConsultado sobre los puntos considerados más críticos en cuanto a la formación de minibasurales o mala disposición de los residuos, el secretario de Servicios Públicos de la Municipalidad de Posadas, Héctor Rodríguez, manifestó que “llamativamente los más críticos son precisamente los denominados ‘puntos limpios’. Siguiendo con la ordenanza que fue aprobada y puesta en funcionamiento el año pasado se establecieron siete puntos limpios en la ciudad. Y como ejemplo de lo difícil que resultan, a uno de ellos, de la Chacra 32-33 lo tuvimos que trasladar en Cocomarola y Calle 73 A”. Rodríguez resaltó que “en los puntos limpios no existe la infraestructura mínima que estaba prevista y no se concretaron. Para que funcione debe tener cerrado un predio, con una guardia mínima, seguridad y una buena información para el vecino sobre lo que puede dejar allí y lo que no puede, de lo contrario se transforma en un punto crítico. Eso nos está pasando, en el punto de Cocomarola y sigue igual en la Avenida 115 y en la Chacra 95. El único que funciona bien es el que está en la vereda de Obras Públicas, por la avenida San Martín, donde hay dos guardias del corralón nuestro, que controlan qué lo que depositan los vecinos. Los contenedores no están para que las carnicerías tiren los desechos, las pollerías arrojen las visceras del animal, cuando eso ocurre en verano, en menos de 24 horas se transforma en un gravísimo problema sanitario. Está previsto para que los vecinos puedan tirar allí las ramas, cacharros, alguna cubierta, ese tipo de basura no convencional, no voluminosa ni orgánica”.Sobre la posibilidad cierta que se concreten las obras necesarias para esos lugares, Rodríguez manifestó que “estaba previsto un financiamiento nacional para poder armar la infraestructura mínima en esos siete puntos limpios. Hablamos de más 100 millones de pesos, más el punto verde, donde van las ramas y compostaje de las mismas para ser reutilizadas como abono en las plazas. En las reuniones que tuvo Losadas en Buenos Aires hizo el planteo ante el gobierno nacional. Lo que está claro que sin ayuda y financiamento externo, destinar los recursos exclusivamente desde la municipalidad es hoy algo imposible. Lo que tratamos de hacer es mantener limpio esos lugares, con cajas que se levantan  con camiones especiales, aumentar la frecuencia de limpieza y apelar a la buena voluntad del vecino”.Frecuencia y tres turnosSobre el retiro de basura domiciliaria, Rodríguez dijo que se mantuvo el mismo esquema que se aplicaba en la gestión anterior. “Necesitamos 24 compactadores de manera estable en la calle para que podamos aumentar la frecuencia en los barrios que hoy es alternada, con tres veces a la semana. Nuestro objetivo en el mediano plazo es llevarla a una frecuencia diaria en esos lugares, pero para eso debemos estar seguros que el equipo está funcionando. Para eso le hice un pedido de compra de cinco compactadoras al intendente, porque con eso podemos asegurar que 25 estén en condiciones de operar en la calle y avanzar con nuestro esquema”.Más adelante y sobre el mismo tema puntualizó que “cuando avancemos con la frecuencia nos permitirá acortar el tiempo de recolección, porque hoy tenemos cuatro turnos: a las 6, 12, 18 y 22. El último es el más complicado, por la seguridad, es donde tenemos más accidentes y se hace más difícil el control de la tarea, aparte que casi no le damos tiempo de descanso a los camiones. Queremos hacer tres turnos y que el último sea a las 18 para un mejor mantenimiento de los equipos”. Con la extensión de Posadas, van apareciendo nuevos lugares para la recolección de basura. “Dentro del circuito se sumó Itaembé Guazú, donde no e
s menor la distancia que hay que recorrer para hacer la recolección. Hasta ahora tenemos allí 400 casas pero en el mediano plazo serán 2000 y después unas 10 mil. Los servicios con los que deben contar es recolección diaria y barrido, que cuando estén todas las casas entregadas deberemos aplicar un esquema nuevo que ya lo tenemos en desarrollo”.