Quizás no llegamos a dimensionar como influye en nuestras decisiones y cuanto podemos llegar a perder por no hacerla conciente. No se trata de una emoción “mala” como comúnmente se etiqueta, simplemente es una emoción y poder tomar conciencia que la estamos sintiendo nos permitirá procesarla y accionar en lugar de reaccionar.Cuando nos sentimos molestos, fácilmente vienen a nuestra memoria recuerdos negativos, que han quedado grabados por tratarse de experiencias emocionalmente fuertes.Como consecuencia de traer a nuestro presente estas historias oscuras o tristes de nuestro pasado, reforzamos la negatividad del presente, que, a la vez, refuerza la negatividad del pasado.Todo este proceso podría representarse como un espiral que puede amplificar la intensidad percibida del conflicto.A su vez, este enojo impacta también sobre nuestras predicciones del futuro volviéndolas mas negativas. Siendo que nuestro futuro imaginado es parte de nuestra mentalidad actual, si es negativo, la profundiza.En una mesa de negociación, tener una visión pesimista de nuestro futuro, probablemente nos lleve a aceptar una propuesta que no aceptaríamos de otra forma, por temor.En el mismo orden de ideas, cuando nos sentimos lastimados o heridos gran parte de nuestro interés suele enfocarse en que el resultado sea "justo", anteponiéndose a otros intereses más importantes y que quedan tapados por esta emoción.Asimismo debemos tener en cuenta que ante un conflicto siempre nos planteamos porque la otra parte hace lo que hace. Como las intenciones del otro son invisibles para nosotros, solemos trabajar sobre supuestos tendiendo a contar una historia negativa sobre las intenciones de los otros, situación que lo profundiza.Por otra parte, el enojo no nos permite ver como nuestras acciones han contribuido en el conflicto y tendemos a pensar que el problema entero es culpa de la otra persona, lo cual lo distorsiona y dificulta su abordaje.Hacer consciente las diversas maneras en que los sentimientos y emociones impactan nos permitirá manejarnos mejor en momentos conflictivos, protegiendo relaciones que nos importan, ayudándonos a mejorar nuestra calidad de vida y lograr la tan ansiada convivencia pacífica.Colabora: Valeria [email protected]





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