Señora Directora: Resulta que por la detención de la ya famosa Milagro Sala, comenzaron a sumarse voces tratando de defenderla y como este problema no es nuevo, llama la atención que haya personas que no la conocen, pero la defienden. Si la Justicia ahora tomó cartas en el asunto (porque durante el gobierno anterior esa mujer fue protegida), entonces debemos festejar que haya jueces que ya no tengan que soportar presiones “desde arriba” y actúen según dictan las leyes, que para eso están y deben cumplirse. De que se haya puesto al frente de miles de personas carenciadas para, “dice que”, ayudarlas y aunque lo pudo haber realizado parcialmente, eso no impide que sea investigada y ya están poniéndose en evidencia pruebas de que tiene cuestiones non sanctas, por las que deberá responder y si le cabe prisión, pues entonces que así sea. Duele saber que la Argentina hoy se encuentre a la par de otros países que han caído en manos de los narcos y quienes la defienden deben pensar que así no se puede vivir. Démosle tiempo a la Justicia para que aclare toda la problemática y después se verá los resultados. Seamos sensatos y no nos acostumbremos a opinar sin conocer a la persona imputada, que es cosa de la Justicia.





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