Señora Directora: 2016 todavía no ha cumplido un mes y en tres semanas ya ha vuelto a demostrar lo que son sus rutas trágicas, donde la muerte pareciera tener su cuota cotidiana de dolor y desgracia. En buena medida, sigue siendo la imprudencia de muchos conductores desaprensivos y autos cada vez más veloces los que generan estos hechos trágicos que, directa o indirectamente, nos enlutan a todos. A la imprudencia de muchos conductores se suma la ineptitud de las autoridades que, pese a los operativos y las campañas que se vienen haciendo cada año con motivo de las vacaciones, en poco han podido modificar esta realidad.Son muchos los que salen a las rutas pensando que tienen la vida comprada y asegurada por largo tiempo, sin comprender el riesgo que significa no advertir que la propia estupidez es madre y responsable de todas las tragedias. A lo que habría que sumar que, como uno, son muchos los imprudentes que también se creen protagonistas de filmes como “Rápidos y furiosos”, sin advertir que esos son personajes de cine, de ficción, e incluso que uno de los más importantes de ellos también pagó con su vida esa “confianza” desmedida tras el volante.





Discussion about this post