La tarde noche del miércoles pudo haber estado envuelta en una tragedia y puesto en luto a familias de Garupá, ya que cuatro menores que habían estado a orillas del arroyo Garupá, bajo el puente cerca de la localidad de Profundidad, fueron arrastrados por las caudalosas aguas del arroyo y dos de ellos terminaron agarrados a unas ramas con el riesgo de ser arrastrados.Pero la intervención y la vocación de servicio de un Cabo Primero de la Policía de Misiones, hizo que esos niños estén hoy con sus padres. Se trata de Ernesto Salvador Nieves, cabo primero de la Policía quien hace ocho años trabaja en la comisaría de Candelaria. Nieve estaba de franco, descansando en su casa del barrio San Jorge el miércoles por la tarde, cuando un vecino pasó y le contó lo que estaba pasando. "Me cuenta que unos chicos estaban en medio del arroyo, pro las lluvias de estos días hubo una crecida muy grande, así que no dudé y le dije a mi familia que me iba a ver qué podía hacer por ellos. Como se nadar bien porque me crié en costa de río y nado desde chico, quería hacer algo por estos chicos que habían ido a ver cómo estaba el agua y a bañarse", contó Nieves a PRIMERA EDICIÓN.Explicó que pasó por la casa de un vecino "le pedí un salvavidas y me fui, en el lugar estaban los Bomberos Voluntario, la Policía y la Prefectura. A dos de los chicos ya los habían rescatado porque estaban cerca de la orilla, los otros estaban más en el centro del arroyo donde hay una profundidad de 10 metros más o menos, estaban prendido por los árboles, en una situación extremadamente peligrosa, encima ya era de noche y era una desesperación constante. Yo agarré un salvavidas de Prefectura, me até a una soga y les pedí que me bajaran que yo los iba ir a buscar. El menor, que tiene 11 años estaba muy asustado, desesperado, así que lo calmé, le dije que todo iba estar bien, le di seguridad, le puse el salvavidas y le dije que se agarrara de mí. Cuando lo tuve bien agarrado, le di al otro chico otro salvavidas y ahí la Prefectura y mis compañeros tiraron de la soga que yo tenía atada y salimos los tres. Por lo menos 10 metros de la orilla", contó.La valentía de este Cabo Primero, salvó la vida de estos chicos "cuando me enteré de lo que había pasado sentí como que tenía que hacerlo, por eso fui. Cuando llegué a mi casa comenzaron a llamarme para felicitarme, incluso el subjefe de la Policía me llamó y me felicitó por mi accionar y mi vocación de servicio. Gracias a Dios pudimos sacarlos, era de noche ya y si no hubiéramos actuado rápido, hoy estaríamos contando una tragedia", dijo.





Discussion about this post