Enfrenta tu deuda mala y así vas a poder empezar a construir deuda buena. La mayoría de las personas ven a la deuda como una palabra de cinco letras. Nos han condicionado a que toda deuda es mala. Nos han enseñado a tenerle miedo a la deuda. Pero no toda deuda es mala. Hay deuda buena también. Entender la deuda buena, y utilizarla, es esencial para alcanzar la independencia financiera.La diferencia entre la deuda buena y la deuda malaSi el dinero que pedís prestado no es más que para gastarlo en consumo (como vacaciones, zapatos, carteras que cargas a tu tarjeta de crédito) entonces esa deuda es deuda mala. El préstamo para el coche por el cual hacés un pago cada mes, esa es deuda mala. La deuda mala es la deuda que pagás de tu propio bolsillo.La deuda buena es la deuda que alguien más paga por ti. Un buen empresario puede pedir dinero prestado para hacer crecer su negocio. Esa deuda es deuda buena si es pagada gracias al flujo de dinero positivo que le genere a la empresa. Cuando comprás una propiedad de alquiler, lo más probable es que tengas una hipoteca o préstamo por ella. Si administrás bien la propiedad, será el alquiler del inquilino el que pagará la hipoteca. Esa es deuda buena.¡La deuda mala te arruina!Todos hemos tenido una enorme cantidad de deudas malas. Algunas fueron por estar en una situación financiera crítica o mejor dicho,quebrados y cargarlo todo a nuestras tarjetas de crédito sólo para sobrevivir. Es una sensación horrible despertar en mitad de la noche, preocupados por cómo haríamos para pagar el próximo pago del alquiler o preguntándonos cual es el próximo gasto que tendríamos que eliminar. Es feo. Y pensamos por qué me pasa esto! Es una de las causas de conflictos en la pareja, o crisis personales.Para aquellos que estén teniendo problemas con la deuda mala, existen herramientas y programas que puedes usar para deshacerte de la deuda mala.Hacele frente a la deuda mala.El consejo es:1 Pagá la deuda o la tarjeta de crédito que tenga la tasa de interés más alta.2 Pagá un poco más cada mes en cada deuda que tengas.3 Reduce tus gastos mensuales. Éstos son algunos puntos destacados.4 Deja de pagar un poco más en cada deuda; eso no funciona. Pagá el mínimo en todas las deudas malas, excepto en la que estaba enfocada en pagar primero.5 No pagues la deuda con el interés más alto primero. Pagá primero la deuda con la menor cantidad adeudada. ¿Por qué? Porque vas a conseguir una victoria rápida para probar que podés hacerlo.6 No es necesario hacer nada diferente con respecto a tus gastos, como reducir gastos o cortar tarjetas de crédito. Lo único que tenés que hacer de forma diferente era aparecer con un extra de $1.000 por mes. Ahora bien, si no puedes hacer eso (que cualquier persona puede hacerlo) entonces tus probabilidades para lograr la libertad financiera son muy pocas. Vos podés, te desafío!Colabora: Perla Haydee DiemingerContadora, Magister en Gestión Pública.





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