POSADAS. Un homenaje a Julio Bueno con la presencia de Máximo Müller y otros actores que, mientras el recordado Bueno aún ofrecía sus actuaciones colaboraban con él, fue una de las “máximas” muestras de humor vistas en el desarrollo de los cuatro días de duración de la Bienal de Artes que tuvo lugar en el cuarto tramo de la costanera. Así lo determinó el aplauso del público que colmaba la sala del espacio mencionado. No le fue en zaga la presentación de “Kossa Nostra” con su espectáculo de títeres que “parecen estar vivos” se oyó comentar a un conocido músico de Misiones. La calidad artística de ambos espectáculos dentro del show “para los homenajeados” fue el determinante de los continuos palmoteos de los asistentes, quienes también reconocieron con aplausos la actuación de Pablo Benegas, excelente cantante paraguayo (de todos los ritmos) y casi sobre el final los dedicaron al recital de la posadeña Cecilia Pahl y el guitarrista Matías Arriazu. Presencia del Ballet del Centro del Conocimiento bailando para su directora, Laura de Aira que recibió su premio de Honor al igual que Ricardo Ojeda, Carolos Acuña, Hugo Guardavientos, Polos Rock, Karoso Zuetta, entre varios más que estuvieron ausentes como Joselo Schuap, Ramón Ayala, Rula Marcial, Jorge Suligoy, Pato García, entre otros, pero sí estuvieron Miguel Brizuela, Pomelo Móttola, Eduardo Korniejzuck y su arpa. Hubo mucho más -imposible reflejarlo en una página-, pero lo importante es rescatar que la Bienal se hizo y organizadores, artistas y público ya esperan el 2017 para ver la próxima que, al parecer, será mejor que la reciente (E.A.).
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