PUERTO PIRAY. Los trabajadores del Aserradero Parodi de esta localidad realizaron un acampe y se manifestaron la semana pasada preocupados por su continuidad laboral dentro de la fábrica, que se encuentra parada por la falta de materia prima. “El patrón tiene buena voluntad, pero su salud empeoró”, detalló uno de los empleados del aserradero. Al parecer, Adrián Parodi no le puede dedicar el tiempo necesario a su empresa y en los últimos meses el establecimiento estuvo parado porque no había materia prima para trabajar. Esto alertó a los obreros, quienes solicitaron al patrón una reunión urgente, pero éste nunca pudo presentarse y ante la falta de diálogo, los trabajadores decidieron hacer una medida de fuerza. PRIMERA EDICIÓN se comunicó con el trabajador y vocero de todo el grupo, Carlos López, quien aseguró que “hicimos la protesta por la incertidumbre de más de veinte compañeros que estamos con necesidades”. La primera medida comenzó el pasado lunes y fue con un acampe frente al establecimiento, adónde llegaron con sus familias, a la espera de la visita de la patronal. Pero como esto no ocurrió, endurecieron la protesta y el viernes cortaron la ruta nacional 12. Allí sí obtuvieron respuestas: tanto uno de los dueños (Parodi) como los dirigentes del Sindicato de la Madera (con Lino Fornerón a la cabeza) se acercaron a conversar con los obreros. Nosotros queríamos que él venga, nos dé una explicación y una solución, que sería la continuidad laboral de todos. Pero, si debe cerrar la fábrica, queremos la indemnización que nos corresponde a cada uno.Principio de acuerdoEn ese encuentro, la patronal les informó que había una vía de solución, que sería la de alquilar el aserradero. Sin embargo, la complicación resulta ahora en la continuidad de la antigüedad de los trabajadores, quienes no van a ceder sus años dentro de la fábrica. “La propuesta de ellos fue que la patronal va a alquilar el aserradero, porque no puede seguir explotando el establecimiento, pero la duda es qué va a pasar con nuestra antigüedad, porque el nuevo dueño va a imponer sus exigencias. Hay gente que tiene más de cuarenta años trabajando en la fábrica, toda una vida y a punto de jubilarse, el trabajador que menos antigüedad tiene es de once años”, relató López y añadió: “la reunión con la patronal y el Sindicato de Madereros fue la semana pasada y posiblemente lleguemos a un acuerdo el lunes (por hoy) en el Ministerio de Trabajo, donde debemos reunirnos. Claro que para llegar a una solución, mis compañeros tienen que estar de acuerdo”.Antes de participar en la mediación, los trabajadores van a realizar una asamblea para definir hasta donde van a ceder con sus pretensiones, pues la idea es llegar a un acuerdo con tal de que no cierre la fábrica, ya que es la principal fuente laboral de los hombres.
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