POSADAS. Muchos de los trabajadores misioneros, por alguna u otra razón, no contarán con la totalidad del medio aguinaldo que les corresponde en diciembre: algunos por tener gran parte de su salario “no remunerativo” y por lo tanto sólo recibirán el pago del porcentaje “en blanco”, y otros -los que cobran más de 17 mil pesos- sufrirán una quita importante por el Impuesto a las Ganancias, que podría llevarse entre el 30 y el 70% del aguinaldo.Y en el caso de los estatales que no alcanzan el piso de Ganancias, tampoco recibirán el bono navideño de 4.000 pesos que han reclamado los gremios estatales, debido a que el gobernador Maurice Closs se negó a otorgar esa bonificación, a pesar de que otras provincias sí lo darán, reconociendo la fuerte inflación que se devora los ingresos.Esta “evaporación” del medio aguinaldo y de la fuerte confiscación del salario que produce Ganancias se debe a que el Gobierno nacional no ajustó este año el mínimo no imponible y, como viene pasando desde el año 2000 -hace catorce años-, no actualizó las escalas salariales sobre las que se aplican las tasas del impuesto.Así, para un trabajador casado con dos hijos que cobra $17 mil de sueldo, el descuento de Ganancias se llevará el 32,8% del medio aguinaldo neto. Y de un trabajador soltero con ingresos por $27 mil, Ganancias se llevará el 76,8% del medio aguinaldo, de acuerdo a los cálculos del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf). El descuento por Ganancias será mayor si percibe una bonificación extra o gana más.Estela Genesini, secretaria general del gremio docente Udnam, señaló que “nosotros adherimos a todas las medidas de fuerza que se convocaron para reclamar la derogación de este impuesto”.“En el caso de los docentes afecta de manera muy fuerte a quienes tienen más horas de trabajo, más antigüedad y cargos jerárquicos. Quiere decir que los que más trabajan y tienen más responsabilidades sufren una quita de su salario”, se quejó la gremialista.Hay casos donde los salarios se acercan a los 15 mil pesos y muchos trabajadores prefieren no recibir aumentos salariales porque pasan a pagar Ganancias y terminan percibiendo un importe incluso por debajo de lo que cobraban antes de recibir el “aumento”. El impuesto les “come” la suba recibida y más.Consultada Genesini sobre cuánto debería ser el piso salarial para pagar Ganancias (hay gremios que lo ponen en 25 mil pesos), sostuvo que “no tiene que existir este impuesto a los sueldos, es una barbaridad, el trabajador debe cobrar su sueldo sin pagar este tipo de impuestos, por eso estamos totalmente en desacuerdo, no se trata de piso, sino que tiene desaparecer”. Un importante sector de los trabajadores estatales de diferentes sectores también se ve afectado por Ganancias: además de docentes, empleados de la Dirección de Rentas, judiciales, médicos de Salud Pública y profesionales de otros ámbitos.En este sentido, Jorge “Koki” Duarte, secretario general de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) Misiones, sostuvo: “Creemos que el salario no es ganancia, es inadmisible que sigan cobrando este impuesto”.“Los funcionarios que en algún momento de la crisis aplicaron un impuesto a los trabajadores (Iete), ¿por qué no se aplican ahora el impuesto a ellos mismos, que tienen los mejores sueldos, en lugar de aplicar a los trabajadores? Vamos a seguir luchando para que los estatales perciban su aguinaldo en forma íntegra”, señaló. Respecto a los sectores alcanzados, Duarte mencionó “docentes, trabajadores de Rentas, médicos que hacen guardias; es una franja importante de los trabajadores estatales a los que se les aplica este impuesto injusto, creemos que los recursos deben salir de otro lado, como de las grandes empresas multinacionales, de los bancos, de los casinos, son ellos los que tienen que pagar más, no los trabajadores”, finalizó Duarte. ¿Más medidas de fuerza?El 27 de noviembre hubo una protesta nacional de numerosos gremios, que repercutió en muchos sectores de la economía, justamente por la eliminación de este impuesto. Los impulsores no descartaron otras medidas de fuerza antes de fin de año. En este contexto, el secretario general del Sindicato de Camioneros de Misiones, Adolfo Velázquez, manifestó que “al Estado nacional sólo le interesa recaudar”.Señaló que se ha definido un plan de lucha a nivel nacional y provincial: “Estamos realizando asambleas en los lugares de trabajo y así definir el plan de lucha que el gremio a nivel nacional y provincial va a llevar adelante en defensa del salario del trabajador. Este año conseguimos 33% de aumento y prácticamente se ha licuado con el impuesto a las Ganancias”, señaló a la prensa. Velázquez afirmó que las decisiones del Gobierno nacional afectan directamente a su actividad: “Lamentablemente, nuestro país pasa por una situación en la que los trabajadores tenemos que pagar un impuesto por trabajar y los trabajadores ya no están dispuestos a seguir financiando el déficit que produce el Estado nacional”.“Entendemos que en situaciones difíciles hay que ayudar, pero también entendemos que los problemas que causan los que tienen la responsabilidad de gobernar el país no los tienen que pagar los trabajadores”, añadió. El sindicalista camionero anticipó que podría haber más protestas por el impuesto a las Ganancias y el bono de fin de año como eje y afirmó que al Gobierno nacional “sólo les interesa recaudar para poder soportar el déficit que generaron y no pueden manejar”. Cuánto descontarán, según el sueldoDe no mediar un cambio, este mes los trabajadores alcanzados por Ganancias verán en sus recibos que una parte sustancial del medio aguinaldo no irá a sus bolsillos sino a las arcas del Gobierno.Para niveles salariales medios, de entre $16 mil y $27 mil de sueldo neto (después de los descuentos de jubilación y obra social), el Impuesto a las Ganancias absorbe entre una tercera parte y hasta el 77% del medio aguinaldo.En lugar de un bono de fin de año para compensar la mayor inflación, ese segmento de trabajadores tiene una doble poda: por inflación y por Ganancias.Eso pasa porque al cobrar el medio aguinaldo, aumenta la presión de Ganancias y en muchos casos hasta se produce un salto en la escala del impuesto y el trabajador pasa a pagar una tasa más alta que la que ya estaba tributando.Con estos números, y al analizar lo que pasó durante todo el año, el trabajador verá otra desagradable sorpresa. Por ejemplo, un trabajador soltero con un sueldo neto de $16
mil, habrá tenido retenciones por Ganancias por 22.200 pesos: la pérdida equivale a casi un sueldo y medio. Y si cobró $20 mil, Ganancias “muerde” dos sueldos al año.Sin embargo, el Gobierno está empecinado en no actualizar las bases imponibles de Ganancias porque eso le permite contar con una recaudación extra -especulando a su favor con la alta inflación- en detrimento de más de un millón de asalariados de sueldos medios y altos. Y también de otro medio millón de monotributistas que tienen un mínimo no imponible más bajo.En dos ocasiones, Cristina Kirchner anunció que el pago del medio aguinaldo quedaba excluido de tributar Ganancias. La primera vez fue para el medio aguinaldo correspondiente a la segunda mitad de 2012. Luego hizo lo mismo con el primero de 2013.Esta vez, acosado por el creciente déficit fiscal, en varias ocasiones, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y el ministro de Economía, Axel Kicillof, dijeron que este año el impuesto “no se toca”. En tanto, no hacen comentario alguno sobre la renta financiera, que sigue exenta de Ganancias.
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