POSADAS. Buscando frenar la manifestación de comerciantes prevista para el próximo miércoles 8, el gobernador Maurice Closs prometió “revisar algunas cuestiones con las multas” excesivas que aplica la Dirección General de Rentas (DGR) en la cuestionada “aduana interna” que funciona en el Arco de ingreso a la capital misionera.Sin embargo, cansados de promesas de revisión y sin medidas concretas, los comerciantes asociados a la Cámara de Comercio e Industria de Posadas (CCIP), ratificaron ayer la movilización y protesta prevista para la semana que viene.Hasta ayer, de manera oficial, el Gobierno no acercó ningún instrumento que pueda ser considerado “beneficioso” para descomprimir la situación de enojo de los comerciantes que sigue sumando adhesiones para la segunda marcha contra “los impuestos abusivos”.Los planteos realizados por el sector económico de la provincia no están sólo vinculados a las multas que de manera discrecional determina Rentas por errores formales, alejados de intentos de evasión fiscal o contrabando. Sino, sobre todo, al accionar burocrático y perjudicial de la llamada “aduana interna” en la retención de vehículos y mercaderías.El consumidor paga más caroAdemás, específicamente sobre el pago a cuenta de Ingresos Brutos, los comercios terminan trasladando el pago del anticipo impositivo que se suma al traslado que hacen los mayoristas que deciden ingresar con mercaderías a Misiones.Por ende, cuando llega al consumidor, el producto es mucho más caro que en otras provincias, generando menor poder adquisitivo y menores ventas a los comercios.
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