MADRID, España (AFP-NA). El Tribunal Constitucional español, reunido en un pleno de urgencia en la capital del país, suspendió la consulta sobre la independencia de Cataluña del 9 de noviembre al admitir a trámite los recursos presentados por el Gobierno español.Antes de esta resolución esperada, el Ejecutivo regional catalán encabezado por Artur Mas se mostró determinado a llevar a cabo esta consulta no vinculante, destinada según él a “pedir la opinión de los catalanes”, y puso en marcha el operativo para poner las urnas el día programado.Admitiendo el recurso del Gobierno central presentado por la mañana, el Tribunal Constitucional, convocado de urgencia por primera vez en su historia, suspendió automáticamente la votación antes de tomar una decisión definitiva en el plazo de cinco meses.Las medidas adoptadas por Madrid para bloquear esta votación fueron aprobadas en un consejo de ministros extraordinario, luego del cual el jefe de Gobierno, Mariano Rajoy, atacó duramente la convocatoria de la consulta, firmada el sábado por Artur Mas.“Es falso que el derecho a votar y a decidir sea un derecho que se pueda atribuir unilateralmente una comunidad”, advirtió el jefe de Gobierno conservador, advirtiendo que “no hay nada ni nadie” que pueda romper el principio de soberanía nacional del Estado español, protegido por la Constitución.El presidente catalán, que el domingo advirtió que “el proceso no acaba con una resolución del Tribunal Constitucional”, criticó la reacción de Rajoy así como la rapidez de la decisión de la máxima corte judicial española.“Hay un Gobierno claramente hostil contra lo que está haciendo la mayoría del pueblo de Cataluña”, dijo Mas en un acto celebrado ayer en Barcelona pocos minutos antes de la decisión del alto tribunal, sobre cuya “velocidad supersónica” en reunirse ironizó: “Han roto la barrera del sonido, no se han esperado ni un solo día. Esto no había pasado en casi 36 años de Constitución”, bromeó el presidente catalán.DesacatoEn el caso de que la Generalitat no acate la resolución, se produciría un hecho insólito en la historia del Tribunal de Garantías, que tendría que evaluar cómo exige el cumplimiento de su resolución. Según la ley que regula el propio tribunal, puede disponer quién ha de ejecutar su resolución y, en su caso, resolver las incidencias.A partir de ahora, el Constitucional da un plazo para que las partes presenten alegaciones. Artur Mas ya adelantó que tratará de convencer al tribunal para que levante la suspensión de la ley y así poder celebrar la consulta el 9 de noviembre.Rajoy ha lamentado profundamente que Mas haya convocado una que va “en contra de la ley, desborda la democracia, divide a los catalanes, los aleja de Europa y del resto de España y de su bienestar”.





Discussion about this post