BUENOS AIRES (DyN). El jefe de Gabinete nacional, Jorge Capitanich, responsabilizó a los bancos y a los fondos buitres, bajo el amparo de los Estados Unidos, de una eventual tarea de “desestabilización” del gobierno de la presidenta Cristina Fernández, a través de “ataques especulativos” sobre el tipo de cambio. En su habitual intervención matutina en la Casa Rosada, Capitanich no ahorró críticas hacia el sistema judicial de los EEUU, del que dijo que su “tan remanida independencia es una mera caricatura”, ya que “no sólo han cooptado la voluntad de un juez (en referencia a Thomas Griesa), sino que influyen en el sistema político de los Estados Unidos”.El miércoles, el ministro de Economía, Axel Kicillof, reiteró el plan de cinco puntos que esbozó la semana pasada en el Senado, que habrían preparado los “buitres” para complicar la situación cambiaria. El jefe de los ministros abundó en detalles: “No podemos pactar con los buitres, con esos grupos minúsculos que denominan a la Argentina la ‘nueva Arabia Saudita’ porque vienen por el petróleo y quieren arrodillar al país”. En su ofensiva, Capitanich también acusó a bancos nacionales y extranjeros de “auspiciar” la operatoria de “cuevas financieras” que fijan el precio del dólar “que se les ocurre” con la pretensión de generar “expectativas desfavorables” para la economía del país, luego de que ayer la divisa superara la barrera de los quince pesos.Además, aseguró que la empresa estadounidense American Airlines forma parte de una “operación” para “generar incertidumbre cambiaria” en la Argentina y denunció que participa de “ataques especulativos contra el país” al limitar a 90 días el plazo para la venta de pasajes por una eventual falta de divisas, tras lo que subrayó que existen “condiciones de estabilidad macroeconómica”.Cristina tambiénLa presidenta Cristina Kirchner criticó la medida de American Airlines de restringir la venta de pasajes a no más de 90 días, al denunciar representa un “ataque especulativo” contra el peso. La jefa de Estado vinculó esa decisión con una iniciativa de los fondos buitres que -dijo- “encabeza” el juez federal de Nueva York, Thomas Griesa.“Buitres con turbinas. Buitres locales, como siempre, sin turbina ni remedio. Vuelan muy bajo. Ataque especulativo sobre la moneda, amplificados hasta el ridículo por los buitres locales. En especial por su radio preferida: Radio Buitre”, denunció la jefa de Estado en una catarata de mensajes que subió en las redes sociales Twitter y Facebook.“No, no es ninguna adivinanza. Es simplemente el ataque permanente contra nuestro país que encabeza el juez Griesa que sigue reteniendo los fondos de los tenedores de bonos argentinos en un verdadero limbo jurídico”, añadió.Subrayó que “ahora quieren asustar (¿o enojar?) a los argentinos que quieren viajar al exterior, que dicho sea de paso no son pocos. Lo cual revela que tan mal no debemos estar. Afortunadamente. ¿No te parece?”.A su vez, Cristina vinculó al presidente de la aerolínea estadounidense, James Albaugh, con los fondos buitres que están litigando contra la Argentina.“Albaugh, asesor principal de The Blackstone Group LP, uno de los más importantes fondos de inversión financieros, que ingresó en la reestructuración soberana de la deuda argentina. Todo hace juego con todo”, afirmó.La Presidenta dijo que el exsecretario de Comercio del segundo gobierno de George Bush, Carlos Gutiérrez, “forma parte del estudio de la exfuncionaria Madeleine Albright y le planteó, directamente, que la estrategia de los fondos buitres con Argentina” iba a contener cinco puntos que luego detalló en su cadena de mensajes:“1.1: Esmerilar y desgastar la figura de la Presidenta de la Nación”. “1.2: Propiciar ola de rumores para generar inestabilidad económica impulsando ataques especulativos”.“1.3: Establecer una política agresiva en el mercado financiero internacional para impedir el acceso de la República Argentina a financiamiento”.“1.4: Propiciar una estrategia para ganar tiempo y lograr un acuerdo favorable a los intereses de los fondos buitres en el año 2016 con un nuevo gobierno, admitiendo los deseos que efectivamente un gobierno afín a sus intereses pueda gobernar el país a partir del 10 de diciembre de 2015”.“1.5: Contratar periodistas, medios de comunicación en Argentina y otros países para atacar al Gobierno y financiar directa o indirectamente a políticos y sindicalistas de la oposición para esmerilar al Gobierno y provocar acciones de desgaste permanente”.“Esta película ya la vimos. Y la función terminó en el 2001 y muy mal”, concluyó.





Discussion about this post