POSADAS. La adolescente caminaba de regreso a su hogar, tras asistir a clases al Instituto Santa Catalina, ubicado en la esquina de las avenidas Santa Catalina y Leandro N. Alem de esta capital. La menor, de 13 años, se dirigía junto a cinco compañeras de su edad hacia una de las paradas de colectivos que se encuentran en las cercanías. Eran las 17.20 del pasado lunes. Al llegar al Palacio de Justicia, situado sobre la primera de las arterias mencionadas casi Centenario, frenó a un costado de las alumnas un vehículo tipo combi, cuyo color los testigos no supieron precisar correctamente. Del rodado descendió un sujeto, quien se abalanzó sobre las menores. Tres de ellas lograron correr, mientras que dos quedaron paralizadas ante la sorpresiva emboscada. El siniestro individuo abrazó bruscamente a una de las atemorizadas adolescentes y la comenzó a arrastrar hacia el vehículo, con evidentes intenciones de raptarla. Fue entonces que la chica mordió al delincuente, quien la liberó por un par de segundos, suficientes para que la víctima corriera y gritara en pedido de auxilio. Esta acción hizo desistir al malandra de sus oscuras intenciones. Subió a la combi y se dio a la fuga. Los testigos afirmaron que el sujeto al parecer no actuó solo, ya que otra persona iba al mando del rodado. No se descarta que se trate de un caso de secuestro a cargo de una organización de trata de personas o de robo de órganos. En numerosas ocasiones este Diario denunció la presencia de asaltantes en las inmediaciones del colegio Santa Catalina, donde al caer la noche la escasa iluminación pública juega a favor de los delincuentes. Similar situación viven los alumnos del Janssen, donde en lo que va del año se denunciaron más de 20 atracos a alumnos.
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