MONTECARLO. Mientras los investigadores continúan en busca de los autores del hecho, ayer por la mañana fueron despedidos los restos de Knott, en medio de un profundo dolor que afectó a sus familiares pero también a buena parte de la sociedad montecarlense.La caravana fúnebre llegó minutos después de las 10 al cementerio municipal de esa localidad, donde luego de algunas palabras cargadas de congoja, amigos, familiares y allegados despidieron el féretro con los restos de la víctima fatal.Knott era familiar directo de pioneros de Montecarlo. Había heredado de su padre yerbales e innumerables hectáreas con plantaciones de cítricos. Hace dos años había regresado al país para manejar esos negocios.
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