DONETSK, Ucrania (AFP-NA). Varias familias huían anoche de Donetsk, capital de la región separatista prorrusa del mismo nombre, donde se producían enfrentamientos con artillería pesada cerca del aeropuerto de esta ciudad rodeada por las tropas ucranianas.Frente a esta ofensiva militar, el presidente ucraniano, Petro Poroshenko, indicó que no se reunían las condiciones de un alto el fuego reclamado por los europeos en diferentes contactos diplomáticos.En el aeropuerto internacional de Donetsk, cerrado tras los duros combates de mayo, se registraron enfrentamientos con artillería pesada durante la noche, anunció el ayuntamiento de la ciudad.En la estación de Donetsk, unas 200 personas hacían cola el viernes por la mañana para comprar billetes mientras escuchaban los tiroteos provenientes del cercano aeropuerto seguidos del vuelo de un avión y de disparos antiaéreos, constató la AFP.En el mercado situado frente a la estación, la gente miraba el cielo con cierta preocupación. “Ya estamos como ayer, ¿crees que bombardearán?”, preguntaba una comerciante a su vecina.Las fuerzas de Kiev iniciaron el jueves un duro ataque contra los insurgentes prorrusos al oeste de Donetsk, ciudad que rodearon tras tomar también posiciones al sur.Donetsk “se está volviendo muy peligroso”, indicó a la AFP un hombre de unos cincuenta años, quien envió a sus hijas y nietos a casa de sus padres en Rusia.En la región vecina de Lugansk, cuatro menores murieron y 16 personas resultaron heridas el jueves por la explosión de un obús en el autobús que los transportaba cerca de Chervonopartizansk, indicó el viernes la compañía de transportes.El ejército ucraniano busca ahora rodear las dos capitales regionales separatistas, Donetsk y Lugansk, que los rebeldes se muestran decididos a defender.El “primer ministro” de la “República Popular de Donetsk”, Alexandre Borodai, evocó el jueves la posibilidad de evacuar a “decenas de miles” o incluso a “cientos de miles” del millón de habitantes de la capital regional frente al avance de las tropas ucranianas.Los soldados ucranianos tomaron varias ciudades a los rebeldes en los últimos días, entre ellas, Slaviansk el sábado. En el frente diplomático, ninguna solución se vislumbra en el horizonte a causa de las condiciones impuestas por Kiev y a pesar de las reuniones entre Ucrania, Rusia y los países occidentales.En una conversación el jueves con la jefa del gobierno alemán, Angela Merkel, el presidente ucraniano se mostró dispuesto a un “alto el fuego bilateral”, si se garantiza el control de la frontera con Rusia para detener el envío de “armas y combatientes” desde este país.Durante la charla, Merkel indicó que los representantes de la misión de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) en el este de Ucrania no pudieron “acceder a los puestos fronterizos a causa de las actuaciones de los combatientes” separatistas, según la presidencia ucraniana.Poroshenko dio a entender también que las condiciones para un alto el fuego están aún lejos.La operación militar ucraniana contra los separatistas empezó hace tres meses.La ONG Amnistía Internacional denunció el viernes la multiplicación de los casos de tortura y secuestros contra los militantes nacionalistas ucranianos y, en menor medida, contra los rebeldes.Según el ministro ucraniano del Interior, unas 500 personas fueron secuestradas en el este del país entre abril y junio. Naciones Unidas habla por su parte de 222 secuestros, según Amnistía.




Discussion about this post