POSADAS. Horas antes de que se cumplan dos meses de angustia y misterio, los hijos de Aída de Jesús Cabrera (66) sufrieron otro golpe, quizás el menos pensado: el último viernes por la noche desconocidos entraron a la casa de la mujer desaparecida y la vaciaron.“Después de todo lo que sufrimos en estas últimas semanas, de que las propias autoridades salieran a difamarnos, y cuando estábamos en un 80% de ánimo positivo, lo del robo nos devastó”, le dice con tristeza a PRIMERA EDICIÓN Claudia Betancur. Ella fue la única que regresó ayer al diario para contar cómo sigue la búsqueda de su madre dos meses después de su desaparición. Claudio y Darío, sus hermanos, están destruidos.Aída desapareció el viernes 28 de febrero de su departamento de la chacra 150, en Villa Cabello. Ese día fue la última vez que sus familiares la vieron. Después de eso, sus hijos iniciaron una intensa búsqueda por todo Posadas, incluso por rincones donde las autoridades no llegan, como Darío le explicó a este medio hace un mes, en una nota publicada el 25 de marzo pasado.En su momento, Betancur hasta viajó a Resistencia siguiendo una serie de pistas, pero no encontró nada. Junto a sus hermanos ya lleva recorrida media provincia y repartidos casi 10 mil panfletos con la foto de su madre. La desesperación en su máximo estado.La búsqueda los llevó incluso al programa de televisión “Los Unos y los Otros”, que se emite todas las tardes por América TV, semanas atrás. “Nosotros antes de venir al diario por primera vez ya habíamos mandado por Internet a todas las productoras de Telefe, Canal 9, América y Canal 13 los datos y documentos que tenemos de la búsqueda. Un día nos llamaron de América y fuimos”, cuenta Claudia.La emisión en vivo para todo el país, asegura, sirvió y mucho. Además de la “pista Clorinda” (ver “La ayuda de la TV…”) la familia pudo comunicarse y contar con la colaboración de, por ejemplo, la Fundación María de los Ángeles, comandada por Susana Trimarco, madre de Marita Verón, desaparecida desde 2002.Sin embargo, dos meses después de la desaparición de su madre, los hermanos vuelven a estar en punto muerto. No tienen pistas firmes y, encima, entraron a robar en la casa de Aída.“Nos enteramos el viernes a las 22.30, porque el chico que cuida la casa vio las ventanas abiertas. Ahí nos llamó y fuimos. Habían forzado la ventana que da a las escaleras. Se llevaron el televisor, un equipo de música y todo lo que había de valor. Hasta dejaron ‘preparado’ el lavarropas. Se ve que tenían intenciones de volver”, cuenta Claudia con una mezcla de sensaciones, entre la angustia y la bronca, que recorre su cuerpo.La situación golpeó duro en los hermanos, quienes de todas maneras aseguran que continuarán con la búsqueda hasta que Aída aparezca. En ese sentido, le contaron a este medio que ayer tenían previsto recorrer la zona de Candelaria, desde donde una vecina se comunicó para contarles que había visto a una mujer muy parecida a la de las fotos. “Ella nos llamó y nos dijo que cree haberse cruzado con mi mamá el pasado jueves 3 de abril en un colectivo que tomó en la Estación de Transferencia de Miguel Lanús. Que ella iba sentada en el asiento individual con una remera amarilla y una pollera. Y que recién ahora la reconoce porque tiene televisión satelital y no había visto los canales locales”, narró Claudia, con ilusión en su voz. Cada llamado enciende las expectativas en los Betancur.Los hermanos saben que no es una tarea sencilla y que, con el paso del tiempo, muchos caen en el desánimo. No obstante, Claudia asegura que no van a dejar de buscarla: “No vamos a bajar los brazos. Por más que nos aprieten o difamen, o que el tiempo pase, vamos a seguir adelante, pidiéndole a la gente que nos siga ayudando. Yo sé que muchos se cansan, que por ahí dejan de compartir las fotos en el Facebook, pero no nos podemos quedar quietos. Por eso pedimos a la gente que nos siga ayudando. Nosotros mantenemos la esperanza de que ella está con vida y que la vamos a encontrar. Mi mamá va a aparecer”. “Ten fe, llegaremos a vos”A dos meses de la desaparición de Aída, su hija Claudia le escribió una conmovedora carta, que compartió y leyó entre lágrimas en su visita a PRIMERA EDICIÓN.Mamá: A dos mesesde tu desapariciónSe cumplen dos meses ya de tu desaparición. ¿Cómo explicar mis sentimientos en palabras? Se te extraña y te tenemos presente las 24 horas de cada día. Ojalá pudieras leer esto y saber con cuánto amor y fuerza te estamos buscando. Tus nietos salen con lluvia, calor o frío junto a nosotros a repartir tus fotos. Papá nos da fuerzas. Te extraña. Aprendió a su estilo a rezar para que aparezcas.Mucha gente hace cadena de oración y nos ayuda. Cuando ya no tenemos ni para sacar fotocopias, siempre aparece cual ángel alguien que nos brinda su colaboración.Te hemos buscado con el corazón en lugares complicados. Panfleteamos la ciudad y otras localidades, hemos pedido una y otra vez sin descanso, por solidaridad.Hemos seguido aún siendo injuriados, porque después de sólo un par de días de mucha angustia seguimos más fuertes que nunca, con esperanzas de encontrarte y darte ese beso y abrazo con el que tanto soñamos.Ojalá pronto llegue el día en que la familia vuelva a estar completa y volvamos a reír, cual “terapia de la risa”, de todo esto, como siempre destacaron nuestros amigos, esa virtud que tenemos de transformar momentos malos en positivos por medio de la alegría.Mamá: ten fe, llegaremos a vos, esperanos. Te amamos. Tus familiares te esperan y te extrañan. “Vieji”, te amo, te mando un abrazo. Sé que te lo volveré a dar en persona.Tu hija. Tu “polaca”. Claudia. La ayuda de la TV: la pista nuevay los llamados de colaboraciónSemanas atrás, Darío y Claudia Betancur participaron del programa “Los Unos y los Otros”, que todas las tardes se emite por América TV a todo el país, con la conducción de Oscar González Oro.Desde entonces, la búsqueda de Aída tomó trascendencia nacional, como explica Claudia, quien asegura que le llegan mensajes de aliento desde todo el país.Aquella aparición televisiva permitió abordar una nueva teoría, cuando una televidente de la localidad formoseña de Clorinda, en la frontera con Paraguay, ll
amó y dijo haberse cruzado e incluso dialogado con una mujer de similares características a las de Aída.“Darío viajó urgente hacia allá y estuvo varios días. Lamentablemente confirmamos luego que no se trataba de mi mamá, sino de una mujer bastante parecida”, relató Claudia, quien confirmó así que la “pista Clorinda” finalmente quedó descartada.No obstante, mediante el programa de televisión los hermanos entraron en contacto con Susana Trimarco, entre otros tantos, quienes le brindaron asistencia y extendieron las redes de las organizaciones que dirigen con el fin de dar de una vez por todas con la mujer.





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