CANDELARIA. Si bien hay un proyecto a largo plazo para recrear un reptilario de magnitud en la zona sur, a principio de semana se procedió a la construcción de los dos primeros recintos para boas y culebras nativas. Ayer en tanto estaba previsto el traslado de un casal de curiyú, a fin de que los visitantes del parque ecológico, con asiento en esta comuna, cuenten con la posibilidad de verlas durante los recorridos por el feriado de Semana Santa. El resto de las especies de víboras, unas ocho especies de boas y culebras, todavía se encuentran en un serpentario privado en Gobernador Roca, a la espera de su relocalización, ni bien se concluyan las obras restantes.“El proyecto tiene un costado educativo y de concientización. Por eso tenemos que contar con un espacio bien ambientado, donde sea posible recibir a los alumnos de los distintos colegios de la zona para que reconozcan y aprendan sobre el cuidado y el manejo que se hace de estos reptiles”, explicó el ecologista Amado Martínez, uno de los involucrados en el proyecto que forma parte del convenio marco firmado hace cuatro meses entre el Instituto Montoya y Ecología. “El hábitat de muchas especies nativas de reptiles desapareció y en la región no hay un lugar adecuado para liberar las serpientes que se van rescatando, con lo cual de acuerdo a las posibilidades, apuntamos a crear condiciones propicias de su ambiente natural”, agregó. Por último, sostuvo Martínez: “Nadie protege lo que no conoce. Muchas veces me ha tocado escuchar a personas que piden que se las libere, pero para hacer honor a la verdad a nadie le va a agradar tenerlas en su campo y mucho menos en el patio de su casa. Aquí estarán resguardadas y las generaciones futuras aprenderán a conocerlas y tratarlas”.





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