MOSCÚ, Rusia (AFP-NA). Greenpeace anunció ayer que pedirá la liberación de sus treinta militantes -26 extranjeros y cuatro rusos- detenidos en Rusia cuando realizaban una acción de protesta contra el gigante petrolero Gazprom en el Ártico.Entre los extranjeros, de 18 nacionalidades, figuran dos argentinos y una brasileña.Los treinta tripulantes del rompehielos “Artic Sunrise” fueron arrestados el 19 de septiembre cuando trataban de abordar una plataforma de Gazprom; 22 de ellos “permanecerán detenidos durante dos meses”, precisó Greenpeace.La organización ecologista dijo que no se siente “intimidada” y que sus abogados “apelarán pidiendo la liberación inmediata de las personas detenidas”.La detención preventiva de extranjeros es muy poco frecuente en Rusia. Fue ordenada por un tribunal de Múrmansk (noroeste), en el marco de una investigación abierta por “piratería”.El tribunal atendió el argumento del comité investigador de la causa, que alegaba el riesgo de que los ecologistas huyesen de Rusia en caso de ser liberados durante la instrucción judicial.“Esas decisiones judiciales son una reliquia de otra época, como la industria petrolera rusa”, opinó Kumi Naidoo, director de Greenpeace Internacional. “Nuestros militantes pacíficos están en prisión por haber mostrado las actividades peligrosas de Gazprom”, añadió.El presidente ruso Vladimir Putin, quien anteriormente había declarado que los militantes de Greenpeace “no eran piratas” pero que habían “infringido la ley”, “no acusa a nadie”, señaló ayer su portavoz, Dimitri Peskov.Putin “expresó su punto de vista, ahora el encargado es el comité investigador”, añadió Peskov.El portavoz de Gazprom, Serguei Kuprianov, declaró el jueves a la radio Eco de Moscú que Greenpeace había actuado “de forma totalmente ilegal”.El capitán del buque había comandado el “Rainbow Warrior”, el barco de Greenpeace hundido en 1985 en el puerto de Auckland (Nueva Zelanda) por los servicios de inteligencia franceses.Entre los tripulantes también se halla el fotógrafo ruso Denis Siniakov, que trabajó en la AFP y Reuters en Moscú. La noticia de su detención provocó indignación en medios periodísticos rusos.En la lista figura también la brasileña Ana Paula Maciel, una bióloga brasileña de 31 años.La sección argentina de Greenpeace lanzó por su lado una campaña para la liberación de Camila Speziale y Hernán Pérez Orsi, los dos tripulantes de nacionalidad argentina detenidos a bordo del “Artic Sunrise”.En su blog en inglés, Camila Speziale relata los intentos de los militantes por escalar a la plataforma de Gazprom y asegura que oyó disparos y que fueron amenazados con armas de fuego y cuchillos por los guardacostas. “En toda mi vida jamás imaginé que sería amenazada por un arma, sobre todo cuando se trataba de una protesta no violenta de Greenpeace”, escribió.





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