WASHINGTON, Estados Unidos (AFP-NA) El gobierno de Barack Obama dijo que tenía una “fuerte preocupación” por la decisión de Israel de permitir la nueva construcción de nuevos asentamientos en territorio palestino pese al inicio de una nueva roda de conversaciones de paz.“Nuestra política no ha cambiado”, dijo la portavoz del Departamento de Estado, Marie Harf, a los periodistas. “No aceptamos la legitimidad de la continuación de la actividad de los asentamientos”.Las conversaciones directas de paz se reanudarán mañana en Jerusalén, a iniciativa de Estados Unidos, con el propósito de encontrar una solución al larguísimo conflicto en Medio Oriente.Se supone que las negociaciones deberían desembocar en un acuerdo en un plazo de nueve meses, y Washington teme que la construcción de nuevos asentamientos por parte de su aliado israelí pueda hacer fracasar el proceso.“Seguimos discutiendo con el Gobierno israelí para hacerle saber nuestra seria preocupación”, dijo Harf.El negociador palestino Mohamed Shtayeh rechazó el anuncio de la construcción de nuevos asentamientos y señaló que era una prueba de que Israel “no se involucra seriamente en las negociaciones”.Por su parte, la ONU también recordó ayer que considera ilegal la colonización en Cisjordania, en reacción al anuncio del Gobierno israelí de construir unas mil viviendas en asentamientos de esa zona y de Jerusalén Este.“La posición del secretario general (Ban Ki-moon) sobre las colonias es clara: las colonias en territorios ocupados son ilegales, lo eran y siguen siendo ilegales”.
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