PUERTO IGUAZÚ. El juez de Instrucción 3 de esta ciudad, Juan Pablo Fernández Rissi, fue agredido ayer cuando intentaba dialogar con un grupo de personas que se manifestaba frente a su juzgado en el marco del primer aniversario del crimen del joven Jordi Díaz.En la ocasión concurrieron familiares, amigos y vecinos de distintas víctimas de hechos violentos. Entre ellas, Liani Itatí Piñeiro, Jordi Díaz y otros.Al parecer, el magistrado accedió a conversar con los presentes y en esa circunstancia fue blanco de toda clase de insultos y amenazas. Incluso, hasta de huevazos, consignaron fuentes judiciales.Es incuestionable e indiscutible el derecho de la ciudadanía a reclamar por Justicia, pero no en cualquier circunstancia y, menos aún, por el camino de la violencia.Distintos portales de noticias indicaron ayer que los manifestantes exigían el apartamiento de Fernández Rissi de la causa, quien efectivamente lo hizo pero sus razones fueron rechazadas sucesivamente por el juez civil Ricardo Gerometta y luego por el Tribunal Penal 1 de Eldorado.La Cámara le devolvió la causa porque no encontró motivos para que se alejara de la investigación.Todo indica que, con el episodio de ayer, Fernández Rissi insistirá con el pedido de alejamiento, ahora con sobradas causas: hay violencia moral y también de hecho.Jordi Díaz fue hallado muerto a golpes a las 11.20 del domingo 20 de mayo de 2012, al lado de un arroyo situado en el barrio Malvinas, de Puerto Iguazú.La causa fue elevada a juicio oral y público con cinco procesados por el delito de “homicidio en riña”. No se pudo establecer quién mató al joven, por eso los cinco llegarán al debate en libertad.
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