POSADAS. La estadística, inédita, es reveladora: Misiones tiene la tasa de homicidios intencionales más alta del nordeste argentino. Ante la ausencia de números oficiales, PRIMERA EDICIÓN llevó adelante una investigación en base a cifras propias y de autoridades de las provincias vecinas para llegar a esa conclusión.En síntesis y según los registros que este diario publicó en un informe especial el último 6 de enero, durante 2012 se produjeron 82 hechos de sangre criminosos en Misiones. El cálculo para establecer la tasa de homicidios es simple: ese número se divide por los 1.101.593 habitantes de la provincia; finalmente, el resultado se multiplica por 100 mil.Ese es el camino que resulta en los 7,44 hechos que se produjeron en la provincia por cada 100 mil habitantes durante el año pasado, una cifra que llama la atención y que refleja la creciente violencia social, que parece haber hecho mella en la sociedad misionera.El número excede ampliamente los números de las otras provincias del nordeste. En Chaco, que tiene prácticamente la misma cantidad de habitantes (1.053.466), durante el año pasado se registraron 47 hechos, lo que arroja una tasa del 4,46 cada 100 mil habitantes, muy por debajo de Misiones.“En 2012 hubo 45 hechos con 47 víctimas fatales. En esta cifra están incluidos los decesos por arma blanca y los femicidios”, le explicaron a PRIMERA EDICIÓN desde la Jefatura de la Policía del Chaco.La situación en Corrientes, con 993.338 habitantes, no difiere mucho. El año pasado dejó 42 muertes intencionales, con una tasa de 4,22, muy similar a la de Chaco. El 2011 había cerrado igual, con apenas un crimen más.“La mayoría de los casos se derivan del interior de la provincia, generalmente de zonas rurales y los fines de semana. El consumo de bebidas alcohólicas, las famosas ‘rondas de trago’, en las que se terminan desconociendo son los más”, le explicó a este medio el oficial García, del departamento Estadística de la Policía de Corrientes, quien agregó que “la lista es menor en casos vinculados a robos o femicidios”, más allá de que este tipo de episodios también está en ascenso.El nordeste argentino se completa con Formosa, en donde finalmente la tasa de homicidios se aproxima a la de Misiones. Es de 7 cada 100 mil habitantes, pero con la diferencia de que esa provincia es la menos habitada de la región, con 527.895 personas, y durante 2012 sufrió ‘apenas’ 37 hechos criminosos.En diálogo telefónico con este diario, el periodista de la sección Policiales del diario formoseño La Mañana, Luis Ortega, explicó que “la característica de los homicidios en Formosa tiene que ver con riñas, desórdenes y el uso de armas blancas. En los casos predomina el apuñalamiento y el alcohol: toma de más y se hincan”.Al respecto, el experimentado trabajador de prensa contó que en Formosa “es común que durante los fines de semana mucha gente vaya al campo, se coma una asado, empiece a tomar y se arme una pelea”.No obstante, Ortega aseguró que los hechos con ribetes pasionales también están presentes en el “ranking” formoseño. “En segundo lugar podemos ubicar a los crimenes pasionales, casi en un 20% de los casos, contra 80 vinculados con ese ‘ritual’ de los fines de semana”, graficó.Diferencias para el análisisJunto con la alarmante cifra salen también a la luz otras aristas que llaman la atención: a diferencia de las provincias vecinas, la Provincia no posee o al menos no da a conocer ningún tipo de estadística de este tipo. Así, sigue la línea del Estado nacional, que difundió por última vez este tipo de cifras en 2009. En aquel momento, la cifra era de poco más de 5 homicidios en Argentina cada 100 mil habitantes. El total de hechos dolosos era de 2543.Desde ese año, no se difundieron más datos, más allá de declaraciones informales de algunas autoridades que aseguran que ese número se mantiene, pero sin demostrarlo en documentos oficiales, como en boca de la ministra de Seguridad de la Nación, Nilda Garré.Al contrario de esta realidad, PRIMERA EDICIÓN pudo comprobar cómo se trabaja en las otras provincias del nordeste. En Formosa, es el Poder Judicial quien se encarga de llevar adelante esos números y los brinda a la sociedad en el cierre de cada año.En Corrientes es el propio departamento de Estadísticas de la Policía el que maneja los datos que luego resultan en un informe anual. También en Chaco.Sin esos números, se hace imposible determinar la incidencia de hechos criminosos en el total de la población y, por ende, no es posible analizar la magnitud de los episodios sobre el total de la mortalidad ni recabar datos sobre las variaciones temporales y geográficas.Para Misiones, el número debe preocupar, ya que más allá del cálculo de la tasa, las cifras frías indican que aquí se producen ni más ni menos que el cuarenta por ciento de los crímenes de la región.




Discussion about this post