(DyN). Mientras la diputada Elisa Carrió le exigió a la Comisión Nacional de Valores (CNV) que se “abstenga” de resolver un eventual desembarco en el Grupo Clarín y la diputada Patricia Bullrich advirtió que, de producirse, llamará “a una movilización popular”, los trabajadores de todas las jerarquías del multimedio expresaron su preocupación y analizaban las medidas a tomar ante esa posibilidad.Durante la jornada, las versiones generaron un clima de incertidumbre en las diferentes empresas del grupo que llevaron a proponer internamente la firma de un comunicado “resistiendo” cualquier intervención del Gobierno, pese a que el subsecretario general de Presidencia, Gustavo López, señaló que, de acuerdo a lo que él sabía “no” está prevista esa acción.La nota de Carrió a Vanoli señaló que una eventual intervención sería “violatoria” de la Constitución Nacional y la Convención Americana de Derechos Humanos.La intervención de las empresas que cotizan en Bolsa está prevista en la Ley de Mercado de Capitales, ya que la ley votada por el kirchnerismo permite a los socios minoritarios solicitar a la Comisión la intervención por 180 días, decisión apelable sólo administrativamente ante el ministro de Economía.
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