BUENOS AIRES (NA). El fiscal Guillermo Marijuán, que investiga las denuncias sobre lavado de dinero que involucran al empresario Lázaro Báez, sufrió una nueva amenaza anónima, y la procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó, le otorgó custodia policial.“Si apela, le vamos a secuestrar y matar a sus hijas”, le dijeron por teléfono a un empleado de la fiscalía de Marijuán, con el fin de presionarlo para que no recurra la decisión del juez Sebastián Casanello de no hacer lugar a un planteo en contra de Gils Carbó por supuestas designaciones ilegales de fiscales.Marijuán denunció que la procuradora designó de manera “ilegal” al fiscal Carlos Gonella al frente de la Procuraduría Adjunta de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac), a quien se acusa de haber recibido la orden expresa de excluir al empresario Báez de las investigaciones sobre lavado de dinero.Además de cuestionar la designación de Gonella al frente de este organismo, Marijuán imputó a Báez en la investigación sobre una supuesta red de lavado de dinero y por esto ya había sido amenazado de muerte a través de un anónimo escrito, que le fue entregado en un bar en el barrio de Belgrano.En este marco, Gils Carbó le pidió al Ministerio de Seguridad de la Nación que adopte “medidas de custodia y protección” para Marijuán, aunque el magistrado habría rechazado la custodia adicional a los dos que tiene habitualmente.El fiscal Marijuán, que hasta el momento mantiene silencio sobre el tema, no denunció penalmente la primera amenaza sufrida, pero sí la segunda, que quedó a manos de Casanello, el mismo juez que desestimó su denuncia contra Gils Carbó y que tiene a cargo la causa por lavado de dinero. El lunes, el abogado Andrés Rabinovich aseguró en declaraciones radiales que Marijuán y su familia habían sido amenazados de muerte tras haber ampliado la imputación en una causa de lavado de dinero a Báez y allegados. Según dijo, el fiscal recibió un sobre con una nota en la que “decía que o se dejaba de joder con la causa o lo iban a reventar a él y a la familia”.En simultáneo, Gils Carbó resolvió asignar custodia al fiscal Roberto Salum, quien fuera “escrachado” por familiares de policías presos en una causa que investiga torturas a dos detenidos en una comisaría en Reconquista.El viernes Marijuán amplió la imputación a Báez y a su hijo Martín, el contador Daniel Pérez Gadín y a Fabián Rossi -esposo de la vedette Iliana Calabró- en la causa que investiga al financista Federico Elaskar y a Leonardo Fariña, por el presunto delito de lavado de dinero.
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