El hogar Santa Teresita está igual o peor que cuando se cayó el muro

POSADAS. Desde que el muro perimetral del hogar de Niñas Santa Teresita se derrumbó con la feroz tormenta del pasado 19 de diciembre, “la situación prácticamente no cambió”, según confiaron los directivos de la institución a PRIMERA EDICIÓN. Desde ese día, miembros de la institución habían apelado a la solidaridad de la población, y a la ayuda de las instituciones gubernamentales, para afrontar los gastos de reparación de la obra, que según estimaciones realizadas rondarían los 90 mil pesos. Hay que recordar, tal como publicó oportunamente este diario, que se requiere una solución integral y no sólo volver a colocar los ladrillos caídos, ya que se trata de una construcción de más de 60 años y podría volver a caer. En cualquier caso, el panorama es bastante crítico a causa de las recientes lluvias y tormentas registradas en la Capital provincial, y por otros motivos, a saber: las raíces de los enormes árboles siguen ejerciendo presión sobre la parte que quedó en pié, y de no iniciar la reparación en breve, también corre peligro de desmoronamiento. “Lo que más nos preocupa es el muro sobre Buenos Aires, porque ahí hay una parada de colectivos, y tememos que caiga en cualquier momento y aplaste a alguna persona. Sería una verdadera tragedia”, explicó Nora Molina, al frente de la institución. La mujer refirió que si bien, desde la Dirección de Arquitectura habían prometido la visita de sus técnicos para evaluar el estado, hasta ahora “nadie vino”, lamentó.Se acuerdo a sus declaraciones, la comisión que preside el Hogar tomó la decisión de esperar una semana más, y esperar a ver qué recepción tuvo la nota remitida al Iprodha y ver si pueden encarar las tareas acogiéndose a algún plan de financiamiento, que pagarían mediante la recaudación de fondos con distintas actividades benéficas. “Si pasada la semana no tenemos respuestas empezaremos a movernos por nuestra cuenta con la venta de bonos colaboración y a trabajar de nuevo con la panadería, para ver cómo podemos pagar las obras”, explicó Molina.“Una vez que tengamos el presupuesto formal empezaremos a movernos por nuestra cuanta para conseguir lo que necesitamos. Es un peligro seguir así”.