Distintos barrios de la ciudad de Corrientes permanecían anoche inundados y sin energía eléctrica como consecuencia del intenso temporal de lluvia y viento que afectó la zona, que también provocó el desmoronamiento de la cinta asfáltica de un puente de la ruta 24, ubicado a la altura de la localidad correntina de Colonia Carolina.Autoridades del Gobierno de la Provincia encabezadas por el vice-gobernador Néstor Pedro Braillard Poccard, a la caída de la tarde realizaron una evaluación de la situación acaecida debido a la intensa precipitación pluvial que sufrió la Capital durante toda la jornada, que generó la inundación de barrios enteros y por el ende la evacuación de numerosos vecinos.Los evacuados se alojan en tres escuelas de la Capital en los barrios Laguna Seca, Mil Viviendas y Río Paraná y el SUM –Salón de Usos Múltiples- del Barrio La Olla, a Cargo del PROMEBA, y suman 993 personas, a las que les brinda asistencias de distinto tipo, como entrega de colchones, controles sanitarios y la provisión de alimentos.El vice gobernador explicó que las áreas del Gobierno provincial se movilizaron rápidamente ante la contingencia, en primera instancia la Dirección Provincial de Energía, que tuvo que cortar el suministro en diferentes lugares de la ciudad y concurrir en asistencia en otros, Vialidad que movilizó sus equipos para liberar los desagües, Salud Pública que concurrió en ayuda de los vecinos, al igual que Desarrollo Humano, todos coordinados por la Dirección de Defensa Civil que desde el inicio del temporal monitoreó la situación y trasladó la información al vice-gobernador que ordenó la cobertura de las distintas áreas. Asimismo la Policía y Bomberos trabajaron en distintas tareas y finalmente el ministerio de Educación dispuso las Escuelas para alojar a los evacuados.Braillard consideró que se atendió en forma correcta y rápida las demandas de la población, que de todos modos hubo situaciones en las que por las condiciones que se generaron en algunos barrios costó llegar. Consignando que la situación está controlada, que el Gobierno tiene dispuesto todos los mecanismos para atender a los damnificados y que la mejora de la situación climática traerá mayor tranquilidad.“A partir de las 3 de la madrugada comenzaron las fuertes precipitaciones que se intensificaron entre las 5 y las 7.30, y se calcula que han caído más de 145 milímetros de agua en pocas horas”, señaló el director de Defensa Civil de la ciudad de Corrientes, Ricardo García.Asimismo, expresó que “si bien la situación está controlada, hace mucho tiempo que no se registraban precipitaciones como estas” y contó que “los desagües no dieron abasto al llover tan intensamente”.Pero, “gracias a la pronta activación de la Junta Municipal de Protección Civil que encabeza el intendente Carlos Mauricio Espínola y lo integran Defensa Civil junto a las distintas áreas del municipio, recorrimos todos los barrios y pudimos controlar rápidamente la situación”, aseguró.“Las calles han drenado todo, los desagües comenzaron a funcionar y reestablecimos el sistema de transporte público de pasajeros que horas antes se había suspendido porque los vehículos debían circular por las arterias inundadas y generaban un oleaje que perjudicaba a las casas del lugar”, indicó García.Finalmente, indicó que “el intendente está monitoreando todo, en las calles hay personal que brinda asistencia sanitaria para todo aquel que lo requiera”, y agregó que “hay algunos barrios que no tienen luz, aunque la mayor parte de la ciudad cuenta con el servicio de iluminación”.En tanto, Carlos Colombo, secretario de Obras Públicas del municipio, señaló que “la ciudad se está recuperando, pero va muy lento” y agregó que “esta vez las precipitaciones afectaron también a las zonas más altas”.Asimismo, destacó el trabajo del personal que “desde las 6 de la mañana está desarrollando tareas para volver a normalizar el funcionamiento” de la capital correntina y puntualizó que “los barrios de San Antonio, La Olla e Independencia son los más afectados de las zonas bajas”.“Ha colapsado el sistema de desagüe, pero si no llueve más en las próximas tres horas, el 80% de la ciudad podrá normalizarse”, aseguró Colombo. Además, recordó que “noviembre y diciembre pasados fueron los meses en que recibimos las últimas precipitaciones más abundantes, una de 76 milímetros y otra de 86, pero el sistema de desagüe funcionó bien”.
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