La Justicia de Tucumán resolvió este lunes el sobreseimiento de los cuatro ex futbolistas de Vélez Sársfield que estaban imputados en una causa por abuso sexual iniciada en marzo de 2024. La medida alcanza a Sebastián Sosa, Braian Cufré, Abiel Osorio y José Ignacio Florentín Bobadilla, y fue dictada a horas del cierre del año judicial.
La decisión fue adoptada por el juez Augusto José Paz Almonacid, integrante del Colegio de Jueces Penales del Centro Judicial Capital, quien concluyó que el hecho investigado “no constituye delito”. Con ese criterio, el magistrado dispuso el cierre del expediente penal que se tramitaba en la provincia.
De acuerdo a lo consignado por medios locales, en el fallo también se rechazó un planteo presentado por la querella para declarar la nulidad de las pericias realizadas sobre teléfonos celulares de personas cercanas a la denunciante. La representación legal de la joven, a cargo de los abogados Patricia Neme y Alejandro Char, adelantó que apelará la resolución ante instancias superiores.
Tras conocerse el sobreseimiento, la denunciante expresó públicamente su disconformidad con la decisión judicial. En declaraciones a un canal de noticias, manifestó sentirse frustrada y cuestionó los fundamentos del fallo, al considerar que no se valoraron elementos que, a su entender, acreditaban lo ocurrido. También ratificó su intención de continuar el reclamo por las vías legales disponibles.
En los días previos, la Fiscalía había adoptado una postura dividida frente a los pedidos de las defensas. Mientras no acompañó el sobreseimiento de Florentín, Cufré y Osorio, sí avaló el planteo presentado en favor de Sosa, por lo que la definición final quedó en manos del juez. El debate en la audiencia se centró en la validez de un informe pericial elaborado por el Equipo Científico de Investigaciones Fiscales, que fue cuestionado por la querella por supuestas irregularidades metodológicas.
La denuncia se remonta a marzo de 2024, cuando una periodista de 24 años acusó a los cuatro futbolistas, entonces integrantes del plantel de Vélez, por un presunto abuso ocurrido en una habitación del hotel Hilton Garden Inn de San Miguel de Tucumán, donde el equipo se alojó con motivo de un partido frente a Atlético Tucumán. La investigación quedó a cargo de la Unidad Fiscal de Delitos Contra la Integridad Sexual.
Durante el proceso, la denunciante prestó declaración en varias oportunidades, incluso mediante el sistema de cámara Gesell. Tras la presentación de la denuncia, el club Vélez activó el protocolo institucional por violencia de género y separó a los jugadores del plantel profesional. En la actualidad, ninguno de ellos continúa vinculado a la institución.
A lo largo de la causa, Sebastián Sosa recuperó la libertad tras el pago de una fianza y regresó a Buenos Aires, mientras que Florentín, Cufré y Osorio cumplieron prisión domiciliaria hasta obtener la libertad en junio de 2024.







