Por Natalia Moyano
Contadora con corazón de escritora
IG: @marianataliamoyano
Se acerca año nuevo, y parece casi el fin del mundo. Todos apurados queriendo hacer a último momento cosas que se propusieron a principio de año, despedidas de todos lados, corriendo con las fiestas y preparativos.
Es común pensar que el año nuevo será todo lo que no fue el que está terminando, y nos llenamos de propósitos renovados.
La realidad es que el año nuevo será exactamente igual al que termina, si no revisamos internamente nuestros pensamientos y emociones.
La clave para que el próximo año sea soñado, y seamos nuestro mejor regalo es revisar nuestro interior y elegir qué queremos dejar en este año que termina y qué queremos llevar para el año que comienza.
Preguntarnos ¿Qué quiero dejar en este año 2025?
Si bien es una pregunta muy personal, hay algunas cosas que son comunes a todos:
• La procrastinación; dejar de postergar iniciar todo aquello que nos proponemos.
• La culpa; no sirve de nada, solo nos sume en un bucle de autodestrucción, en vez de esto, ver que podemos aprender y seguir adelante.
• El miedo; que nos impide pasar a la acción.
• Perdonar, y perdonarnos, cerrar ciclos en este año, entendiendo que cada uno hace lo que puede con las herramientas que tiene en ese momento.
• El desorden; si nos falta orden interno, de prioridades, y tenemos desorden externo, no aprovechamos todo nuestro potencial.
• El diálogo interno destructivo; solo aplasta nuestra autoestima y nos hace daño.
¿Qué elijo llevar al año 2026?
• Entorno saludable; las personas que realmente nos suman, y nos impulsan a ser nuestra mejor versión.
• Hacer nuestra parte y desapegarnos del resultado.
• Establecer nuestros “no negociables”; nos ayudan a poner límites y respetar nuestras prioridades.
• Ser disciplinada o disciplinado y constante con lo que elijamos emprender.
• Disfrutar del momento presente plenamente.
Tomar estas decisiones sobre que dejar en este año y que llevar al próximo, nos ayuda a convertirnos en nuestro mejor regalo, y eso sucede cuando aprendemos a exteriorizar en el plano físico todo lo que ya somos por dentro.
Que empecemos este año nuevo dejando atrás lo que ya no elegimos, y arranquemos el nuevo dándonos la oportunidad ser todo lo que podamos ser disfrutando del camino. ¡Feliz año nuevo!








