Para festejar, primero hay que saber sufrir. Si no pregúntenle a Sporting de Santo Pipó, que pasó de una cómoda victoria a casi perderlo y en la lotería de los penales fue más certero que Estudiantes para quedarse con el título del Torneo Clausura del ascenso posadeño.
Fue un partido de locos bajo la intensa lluvia en el estadio Clemente Argentino Fernández de Oliveira, pues a lo largo del encuentro el trámite pegó distintos giros y un gol agónico del Pincha llevó la definición a disparos desde los doce pasos. Allí, el conjunto pipoceño se repuso de dos disparos fallidos y terminó celebrando con el trofeo en mano.
La apertura del marcador llegó a los 14 minutos, tras un grosero error del arquero Llaneza, que fue aprovechado por Samuel Millán para poner el 1-0.
El segundo tanto llegó a los 39, luego de otro error que permitió que Víctor Amarilla empuje el balón a la red con el arco libre.
Sporting se fue con dos goles de ventaja al vestuario, pero todo cambió en el complemento. Si bien el partido fue muy cortado por la cantidad de faltas que hubo, el Pincha fue puro corazón y empujó con más ganas que juego.
Estudiantes llegó al descuento luego de una jugada polémica y es que, antes que Benítez empuje la pelota, hubo una mano de uno de sus compañeros que pudo haber sido cobrada.
Ese gol le sirvió de impulso al elenco posadeño, que siguió buscando ante un cansino rival y, cuando parecía que estaba todo dicho, un gol agónico extendió la definición. A los 49, apareció Cristian Rodríguez, con un pelotazo desde afuera del área y marcó el 2-2.
En los penales, Sporting desperdició sus dos primeros disparos y todo estaba a pedir de Estudiantes, pero estos no supieron aprovechar, la ventaja. Luego del penal errado por el arquero Recalde, Sporting sentenció el triunfo en los pies de Millán.
De esta manera, Sporting deja atrás la División B tras el pesar del descenso del 2024 y el año próximo jugará en la Intermedia.





