La Dirección General de Seguridad Acuática, perteneciente a la Subsecretaría de Protección Civil de la Provincia, concretó las pruebas evaluatorias para los guardavidas recibidos que los habilite a desempeñarse en la actividad por el período de un año. En esta ocasión, para el verano 2025-26, Misiones contará con unos 120 (ciento veinte) guardavidas, un número considerado “ajustado” para satisfacer la demanda.
Con los exámenes desarrollados en el balneario Costa Sur, para la modalidad aguas abiertas y la piscina del complejo Casa del Docente Misiones, para las actividades en natatorios, concluyó la Reválida a los profesionales guardavidas.
“Son profesionales que ya vienen trabajando hace años, algunos desde el año pasado y otros que egresan este año, que son alrededor, entre las dos escuelas existentes, unos treinta y siete guardavidas que nos van a ayudar a cubrir un cupo importante que tenemos en Misiones. Siempre eran entre veinte y veinticinco egresados así que realmente estamos contentos, porque quiere decir que las escuelas están funcionando bien”, indicó Franco Bacigalupi, máximo responsable de la Dirección General de Seguridad Acuática .
Agregó que “los 120 guardavidas habilitados conforman una cantidad medio ajustada para cubrir la demanda total en la provincia. Capaz que uno o dos guardavidas queden como suplentes, por si alguno no trabaja durante el período, tiene alguna enfermedad o quiera tomarse unos días de vacaciones”.
Los lugares que tienen mayor demanda de guardavidas son “Posadas y Candelaria. El tema está en que tenemos muchos guardavidas que se están yendo a Brasil a trabajar o Portugal y lamentablemente, es un cupo importante. Estamos hablando de entre diez y quince guardavidas por temporada y eso se nota, nos pasa factura”, apuntó Bacigalupi.
En la misma línea indicó que “algunos luego regresan, otros aprovechan como trampolín Brasil para poder ir a Portugal, poder entrar a Europa. Así tenemos a varios egresados de acá trabajando en Portugal, España y Australia. Sumar la experiencia del mar en la parte laboral y la cercanía que tenemos, convierten a Brasil en un trampolín para poder emigrar a otro continente y eso lo aprovechan bien”.

La exigencia, es clave
Una de las claves por la cual se les abren las puertas a los guardavidas recibidos en Misiones en otros lugares del mundo, “es que tenemos una reválida que es la más dura del país. No dura, sí exigente no en el mal sentido sino que evaluamos estrictamente distintos aspectos de la capacitación, como por ejemplo rescates en distancias de 25, 100 metros, buscar el torpedo y remolcar a una víctima a 50 metros, eso es solo una de las partes de la reválida. Nos ocupamos en ver que las pruebas sean lo más real posible con respecto a lo que va a tener que enfrentar un guardavidas tanto en pileta como en el río. Acá es donde uno empieza a darse cuenta de quién está entrenado porque a medida que van pasando las pruebas, las exigencias son más fuertes y le van pasando factura al físico del guardavida”, manifestó Bacigalupi.
Otro detalle no menor es que “este año tenemos casi el mismo porcentaje de guardavidas hombres y mujeres. Las chicas se destacan muy bien en lo que es la patada de pecho, que utilizamos para remolcar a una víctima en el agua. Las escuelas de guardavidas también están teniendo un alto porcentaje de chicas, así que está bueno eso porque nos demuestra que no es una profesión exclusiva de hombres”.









