Un menor de 10 años ingresó de urgencia al Hospital de Pediatría “Dr. Fernando Barreyro” por una presunta picadura de raya, ocurrida este domingo en la zona del balneario El Brete.
El caso ocurrió este domingo alrededor de las 17.50 cuando personal de la División Seguridad Costanera acudió a un llamado de emergencia en la zona de la bahía. Una comisión se dirigió al lugar y entrevistó a Rodrigo de 22 años, quien manifestó que su hermano Ariel se encontraba jugando en aguas del río Paraná cuando sintió un fuerte dolor debajo de planta del pie.
Primeramente, el niño fue asistido por los guardavidas del lugar quienes pusieron en conocimiento que se trató aparentemente de una picadura de raya, y posteriormente en un móvil se procedió a su traslado hacia la guardia de emergencia del hospital pediátrico para su atención.
Playas habilitadas, pero…

Las playas Costa Sur y El Brete de la ciudad de Posadas son las dos únicas habilitadas para el baño. Funcionan de 8 a 20, con guardavidas y mantenimiento permanente. Pero, todavía no arrancó la temporada 2026: la misma inicia la segunda semana de diciembre.
Y con ello, viene la advertencia: “se está efectuando el mantenimiento del fondo próximo a la playa, con la extracción de algas, que habitualmente arrastran las corrientes, para luego proceder a la colocación de las mallas de seguridad para evitar la aproximación de especies como pirañas o rayas a la zona de más cercana de la costa“, indicó días atrás Isaac Villalba, director de Deportes Náuticos y Costanera de la Municipalidad de Posadas a la radio FM 89.3. Mientras se realizan estas labores, las redes metálicas se retiran y “la instalación definitiva de las redes se hace una vez que la limpieza está completa y el fondo está parejo”, agregó el funcionario.
Lo dicho. La temporada de verano arranca la segunda semana de diciembre y mientras tanto las playas habilitadas cuentan con horarios más reducidos y sin acceso al agua para nadar. Todo queda a criterio del bañista, se advierte.
Palometas y rayas

Para los bañistas, el verano es ideal para ir a las playas, sin embargo, a las palometas eso no les importa: las pirañas, de julio a enero, realizan su desove y cría en aguas del río Paraná y defienden -no con uñas, pero sí con dientes- esta área esencial en la época más importante de su vida. Es decir, actúan como medida de defensa al lugar donde desovan o nacen sus crían, no para alimentarse de las personas.
“Estas pirañas, lo que han hecho es utilizar toda esta zona inundada (por el embalse de Yacyretá), de poca profundidad, como área de cría y desove. Ello se debe a que esas áreas inundadas han propiciado el crecimiento de otra vegetación favorecido por el aporte de nutrientes. Entonces como la ciudad se caracteriza por descargar líquidos cloacales y domiciliarios a la costa del río, va a ser común encontrar especies vegetales que crecen bajo el agua (algas, camalotes) y que le dan un lugar adecuado para que estas especies hagan sus nidos y desarrollen su área de desove”, explicó tiempo atrás el licenciado en genética de la FCEQyN-UNaM), Danilo Aichino a PRIMERA EDICIÓN.
Otra especie que también genera miedo entre los bañistas es la raya y el licenciado Aichino dijo que “las mismas no se arriman a la costa para el desove como las pirañas sino para alimentarse. La precaución que hay que tener en esos casos es que cuando uno ingresa al agua, la primera persona que lo hace debe tener cuidado y la precaución de hacer ruido, tratando de espantarla y no pisarla”.
Agregó el especialista que “las rayas no se van a arrimar si uno hace ruidos, movimientos en el agua y los accidentes generalmente se dan con los primeros ingresos de las personas. Las rayas están todo el año y pasa que durante el verano las personas ingresan al agua y se topan con ellas”.





