El juez de Instrucción de Puerto Rico, Leonardo Manuel Balanda Gómez, firmó la prisión preventiva para un hombre de 29 años, acusado de abusar sexualmente de su hijastra en forma reiterada, desde que tenía 4 y hasta los 8, señalaron fuentes judiciales.
La investigación, a cargo del fiscal de Instrucción Correccional y de Menores Héctor Simon, se inició a partir de la denuncia que radicó la madre de la víctima, ante la comisaría de la Mujer de la Unidad Regional XV, con asiento en Montecarlo, el pasado viernes 16 de mayo.
La progenitora habría manifestado que su hija, actualmente de 8 años, le comentó que su padrastro (pareja de la denunciante), abusó de ella desde hacía cuatro años. La niña le habría relatado que los hechos ocurrían en la vivienda familiar, ubicada en la localidad de Montecarlo.
Los hechos se habrían registrado, tal como le habría confiado la menor a su madre, cuando quedaban solos en el citado domicilio, donde el acusado le quitaba las prendas de vestir y la obligaba a mantener relaciones sexuales, conforme surge de las actuaciones policiales y de los propios dichos de la niña en Cámara Gesell.
Confió en su maestra
Fue clave la declaración testimonial en sede judicial de una docente, quien habría manifestado, entre otras cuestiones, que trabaja en la escuela donde asiste la menor, donde la misma le habría contado que “el padrastro le hacía cosas indebidas, brindando detalles y que pese a que ella se resiste el hombre la obligaba”.
Además, relató “el sufrimiento que padecía cada vez que la atacaba”. Luego que le dijo a su madre que “le dolía el abdomen, y que la misma le contestó que ‘era por el sol, porque ella camina y va al sol’”.
Por su parte, el pasado viernes 17 de septiembre se escuchó la declaración de la pequeña mediante Cámara Gesell, con la presencia de autoridades judiciales y profesionales del Poder Judicial.
En la ocasión la menor ratificó sus dichos y señaló al padrastro como el agresor, precisó un vocero en base al expediente. La niña también habría expresado que el imputado le habría dicho que “no le tenía que decir nada a su mamá” y que los hechos sucedieron en forma reiterada. El acusado fue trasladado a la UP VII de Puerto Rico.
La imputación
Por los delitos de “abuso sexual agravado por la condición de guardador del imputado respecto de la víctima, en concurso real por la comisión de varios hechos, todo en perjuicio de la menor que era su hijastra”.





