En el marco del Día Mundial de las Librerías, escritores de Posadas compartieron con el público lecturas breves de fragmentos de sus propias obras.
El evento tuvo lugar en la librería Tras los Pasos (La Rioja casi San Lorenzo), donde los autores misioneros relataron poesías, cuentos y relatos, generando una experiencia distinta para el público y creando un vínculo directo entre escritor y lector.
La iniciativa, impulsada desde el espacio literario, buscó propiciar una interacción espontánea entre autores y visitantes, en un entorno íntimo y simbólico.
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN, la escritora Rita Figueredo celebró la propuesta y expresó su entusiasmo por “festejar el Día de las Librerías en un espacio tan hermoso, tan parecido al cielo, como decía Borges”.
Por su parte, Nelly Herrera destacó la oportunidad de acercarse al público para “compartir un poquito de lo que uno hace con la gente me parece espectacular. Es una propuesta sumamente interesante y original; imagino que muchos se van a entusiasmar con esta experiencia”. Asimismo, Carolina Barrios, quien participó junto a Ginette Stuber, ilustradora de dos de sus libros infantiles, manifestó: “Queríamos acercar un poco de literatura a la infancia y también compartir con los adultos, que somos los encargados de transmitir ese amor por los libros. Estamos felices de participar y celebrar este día que une a escritores y lectores”.
A su vez, Stuber agregó: “Es un placer estar acá, en un lugar tan representativo, que desde hace más de veinte años forma parte de la cultura de Posadas”.
En consonancia con sus colegas, Osvaldo Mazal expresó su satisfacción por ser parte de la iniciativa y la calificó como “una buena experiencia de decir nuestros poemas o cuentitos al aire, y que alguno los escuche”.
Por último, Hugo González, quien compartió un fragmento de su libro Cuatro exilios, destacó: “Es un placer y un honor estar en este lugar donde florecen los poemas y los versos. La soledad del autor es algo recurrente, pero este momento es fantástico porque uno puede compartir con las personas”.
La jornada también contó con sorteos de libros entre los clientes y dejó un ambiente de cercanía y comunidad entre autores y lectores, reafirmando el papel de las librerías como espacios de encuentro y también de celebración de la palabra escrita.





