Cuando restan siete semanas para recibir al 2026, las fiestas de cierre de año de empresas, grupo de amigos, recepciones, casamientos, cumpleaños de quince dejaron prácticamente sin fechas disponibles a los principales salones de eventos de la capital provincial y de los “quinchos” que aparecen como una opción también muy buscada.
En una consulta realizada por este Medio a empresarios y organizadores de eventos sobre la demanda para esta última parte del año, la respuesta fue unánime, “está complicado conseguir fechas antes de Navidad o de Año Nuevo. Diríamos que no quedan más espacios libres, salvo que se baje algún contrato, cosa muy rara que pase. Está todo al límite y a quien no reservó antes se le complicará”.
El propietario de Quinta La Juliana, Daniel Lascurain, en diálogo con PRIMERA EDICIÓN, dijo que “en nuestro caso, estamos con agenda ocupada para lo que queda de noviembre y todo diciembre. Tenemos doce recepciones, un número que realmente es muy bueno por todo el trabajo que llevamos adelante desde hace años”.
Agregó que “tenemos fiestas, celebraciones, encuentros, desde los jueves hasta los sábados, inclusive, todos ya con confirmación hasta fin de año. Ahora empezamos a sumar los domingos, porque al no disponer de los días anteriores hay quienes deciden asegurarse una fecha, más que nada las empresas que hacen la fiesta de fin de año o también del personal de los colegios, que vienen y pasan todo el día”.
Marcó una diferencia, que considera que en el caso de La Juliana es un atractivo extra, y es que “acá les brindamos diversas opciones de menú, música, decoración, tenemos la piscina para usarla si quisieran, buena sombra, espacio al aire libre, nuestro salón cubierto, algo que no en todos los sitios se conjuga y de esa forma también se aseguran que ante una eventualidad, como que llueva, puedan disfrutar igual del encuentro”.
Lascurain dijo que “en particular, este año comparativamente con el anterior, nos fue mejor. Por lo que tenemos agendado, se pueden agregar algunos más en otros días de la semana que no sean los fines de semana, pero serán 70 (setenta) eventos. Es una cifra buenísima”.
Detalló que “una particularidad es que tuvimos muchos casamientos este año, es uno de las datos salientes, nos alegra porque la gente sigue eligiendo formalizar su unión, confiando en la familia gracias a Dios y eso, más allá de lo empresarial, me parece espectacular”.
Alternativas para celebrar
En cuanto a las fiestas, encuentros o reuniones para despedir el año, también fueron ganando espacio los “quinchos”, que cada vez son más en la capital provincial y que brindan la posibilidad de celebrar, quizás, de una manera distinta, más informal, con pileta incluida y compartiendo los gastos.
Roberto López, encargado de uno de los tantos quinchos de Posadas, contó que “para el verano se impone desde hace ya un par de años esta modalidad, donde alquilan, vienen, hacen su asado y disfrutan de la pileta, ya sean familias o grupos de amigos”.
Los quinchos cuentan con instalaciones, en su gran mayoría, con parrilla, cocinas, baños, ventiladores, cubiertos, mesas, sillas e incluso con una pequeña habitación con aire acondicionado. El precio, ronda, dependiendo fundamentalmente de la ubicación entre 150 mil y 300 mil pesos.
“Ahora también se está alquilando en forma fraccionada, desde la mañana hasta las 16 y luego a partir de las 18 hasta las 2 o 3 de la mañana. Es una tendencia”, afirmó.

Más festejos que días disponibles y una de las claves, “las familias”
Reconocida por su trayectoria en la organización de eventos, Valeria Cappagli consideró que el presente año fue uno de los más fructíferos para la actividad y cerrarán con una agenda cargada. Cumpleaños, recepciones, bodas y reuniones empresariales, consiguieron “recuperarse” después de los duros momentos que vivió el sector con la pandemia.
En una entrevista con la 89.3 FM Santa María de las Misiones, Cappagli detalló que durante noviembre “tenemos 22 fiestas y en diciembre más eventos que días del mes, porque serán en total 32. Es decir que estaremos cerrando el año con más de 150 celebraciones realizadas, una cifra muy buena”.
Principalmente, “el crecimiento se sostiene por la apuesta de las familias, que a pesar del contexto económico, continúan eligiendo celebrar”, destacó.
Por otro lado, brindó un dato fundamental sobre los cambios que fueron teniendo las celebraciones, “el formato de las fiestas varió pero la actividad no se detuvo. Las empresas redujeron la cantidad de encuentros, capacitaciones y recepciones corporativas, pero los eventos sociales mantienen una ocupación plena. Los cumpleaños, casamientos y los quince años volvieron con toda la fuerza, que era algo que se había aplacado un tanto”.
Por otro lado, recordó que en el servicio que brindan “se incluye todo lo necesario para que el cliente solo disfrute de la jornada. Salón, decoración, catering, fotografía, filmación, discoteca y animador. La gente paga por persona y ese día simplemente se pone linda y viene, el resto está resuelto”.









