Las comunidades guaraníes Yvoty Okara (Flor del patio) y Mainomby (Pajarito), de Bonpland, y las Escuelas Rurales 131 “Fragata Libertad”, del paraje Campiñas, y 116 “Fernando Kelm”, del paraje Ojo de Agua, también de esa localidad, recibieron la visita de voluntarios de la ONG Mamis Solidarias, de Buenos Aires, en su viaje anual solidario.
El grupo también compartió con los integrantes de las Aldeas Guaporaity y Sapukay, en el municipio de Hipólito Yrigoyen. “Si bien viajamos entre cinco y seis veces al año, esta es una visita más completa, donde viene un grupo más numeroso de voluntarios, que trae donaciones, alimentos, regalos, compartimos almuerzos, en compañía de ‘Tute’, que hace unos shows muy divertidos y los chicos lo adoran. Compartimos cada uno de los días de permanencia de una manera más tranquila, más relajada y disfrutamos un montón”, manifestó la periodista Paula García, integrante del equipo.
Contó que, en esta oportunidad, volvieron con el programa “Amigos a la distancia”, en el que chicos de distintas escuelas de CABA, Gran de Buenos Aires y del interior como Bolívar y Pigüé, arman una cajita para su amigo a la distancia. “Le contamos quién es el nene o la nena, cuántos años tiene y, el alumno, coloca, todo lo que entre, en una caja de zapatos para que aquí se vayan sorprendiendo con los regalitos que reciben. Hace varios años que empleamos esta modalidad y la verdad es que a los chicos les encanta. Y a los niños de las escuelas que los arman, también. Saber que, aunque no los conozca, hay alguien con quien están compartiendo eso está muy bueno”, agregó.
También se refirió a otro programa que se denomina “Apadriná mi merienda”, donde los chicos de entre dos y 15 años, reciben un refuerzo nutricional. “Con ese fin, tienen padrinos de distintos lugares del país, que aportan mes a mes para que ellos puedan recibirla. En ocasión de este viaje, les prepararon, además, una caja especial, con alimentos, regalitos, cartitas”, señaló.

Sostuvo que la ONG “Mamis Solidarias”, para quien “poquito es mucho” tiene su propio equipo de voluntariado de animación que prepara los juegos especiales para este tipo de encuentros. Por ejemplo, “Tute los hace reír muchísimo y terminamos siempre con una fiesta. El sábado no pudimos hacerla por la lluvia intensa, pero la hicimos el domingo en Guaporaity, donde llevamos espuma, música, cosas de cotillón, bailamos chicos y grandes, es un momento lindo, especial, en el que disfrutamos muchísimo, nosotros y ellos”, celebró la periodista, al tiempo que agradeció a las empresas misioneras que acompañan a “Mamis Solidarias” desde hace muchos años, junto a otras firmas de Buenos Aires.
“Llegamos solamente a cuatro comunidades mbya guaraní pero sabemos que están todas en la misma situación”, lamentó. Con un grupo solidario, comenzaron a ayudar, “sin tener mucha noción de dónde vivían, de cómo eran estas familias, hasta que un día decidimos ir a conocerlos. La verdad es que una vez que los conocimos ya no pudimos romper ese vínculo porque encontramos comunidades que realmente necesitaban mucha ayuda, pero sobre todo descubrimos a personas hermosas con las que fuimos creando vínculos a lo largo de todo este tiempo y por las que aprendimos a trabajar”, aseguró.





