La Asociación que nuclea a los Bomberos Voluntarios de Corpus Christi celebrará este domingo el tercer aniversario de su fundación, que lo encuentra en plena consolidación como institución y al servicio de la comunidad en diversas actividades.
El ordenamiento administrativo le permitió, por primera vez, acceder al subsidio nacional establecido por la Ley 25054, conformado por fondos provenientes de la contribución obligatoria del cinco por mil de las primas de seguros y destinado exclusivamente a las asociaciones y federaciones de bomberos voluntarios.
Julio Markiewicz, quien preside dicha Asociación, en diálogo con PRIMERA EDICIÓN, destacó que “este aniversario nos encuentra en pleno crecimiento. Este año recibimos nuestro primer subsidio nacional al que acceden todas las instituciones del país que están al día con sus cuestiones administrativas y que es para uso específico en equipamiento, compra de materiales para el cuartel, es decir que ya tiene los destinos fijados y también los porcentajes que se pueden ocupar”.
Agregó que “en base a este subsidio, por ejemplo, adquirimos nuestra primera autobomba, que es la que teníamos en comodato del cuartel de Jardín América. Es una autobomba DAF modelo 1982. El monto que recibimos del Estado nacional es de 31 millones 453 mil pesos, que es lo que nos corresponde a cada uno de los cuarteles al día con su documentación”.

En la misma línea Markiewicz dijo que “también aprovechamos para hacer una compra de elementos de protección personal y herramientas para el cuerpo activo, que aproximadamente nos demandó unos diez millones de pesos. Se adquirieron borceguíes forestales, botas para incendios estructurales, dos equipos estructurales nuevos que incluyen casco, botas, guantes y pantalones de fajina. Además se compraron herramientas específicas como un McLeod, otro que se llama Halligan, que son elementos para la lucha en el incendio forestal”.
Actualmente “en el cuerpo de bomberos voluntarios de Corpus tenemos seis integrantes activos. Hay que destacar que del año pasado se recibieron tres bomberos voluntarios más, que cursaron en la Academia Provincial y rindieron los exámenes tanto físicos como intelectuales, aprobando todo. Ellos están gozando de los beneficios que tiene un bombero voluntario, que no cobran sueldo, pero sí tienen obra social que le otorga la Provincia a través del IPS y también el aporte jubilatorio. Esa obra social no es solamente para el bombero sino también para su grupo familiar”.
Recordó Markiewicz que “nuestra sede continúa en un predio que nos presta el Obispado de Posadas, en la iglesia católica y agradecemos esa cesión. Hemos renovado el comodato por tres años más y la idea es que a partir de que se sigan acreditando los subsidios nacionales, buscar un terreno aquí para adquirirlo y empezar a construir nuestra propia sede”.
También a futuro buscarán adquirir “una camioneta doble cabina 4×4 para que actúe como vehículo de ataque rápido ante algún incidente y también como transporte para movilizarnos a los cursos de capacitación”, remarcó.





